Autonomía en la educación superior

Señor director:

El proyecto de ley de reforma de la educación superior está en pleno debate en el Congreso, luego de que el gobierno presentara hace ya unas semanas las indicaciones sustitutivas. Lamentablemente, el proyecto no ha mostrado un cambio significativo en su esencia y fundamentos, lo que afecta de manera importante la autonomía de las instituciones. Este aspecto de la vida universitaria debe ser cuidado de manera estricta, para evitar influencias externas a la institución, junto con velar por la libertad académica de los profesores.

A los argumentos vertidos desde la UC, se suma la reciente exposición de las autoridades de la CNA en la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados. En esta reunión se expresó la preocupación por lo que presenta el proyecto en cuanto a las restricciones al desarrollo de las instituciones; al engorroso papel fiscalizador de la futura agencia, lo que puede poner en conflicto su labor con otras instituciones y a lo negativo de la propuesta de fijación de cupos y aranceles, entre otros aspectos.

Mención especial merece la preocupación por las propuestas del nuevo sistema de admisión universitaria y la conformación y mecanismos de nombramiento de los consejeros de la agencia, ambos aspectos que abren claramente la puerta a la influencia política del gobierno de turno.

Lo descrito implica un grave daño a la autonomía del sistema de educación superior, en especial a la necesaria diversidad de cada uno de los proyectos educativos. Este es ciertamente el mayor riesgo que presenta el proyecto en discusión, lo que es más grave que las diferentes propuestas de financiamiento del sistema, en las que lamentablemente se ha puesto la mayor atención.

Ignacio Sánchez D.

Rector Pontificia Universidad Católica de Chile