Autor habría dejado una carta donde señalaba sus intenciones de suicidarse tras el tiroteo
Wellington Menezes de Oliveira, ex alumno del colegio, ingresó con dos revólveres a dictar una conferencia a alumnos de octavo básico.
Con dos revólveres y con la excusa de dictar una conferencia a alumnos de octavo básico, Wellington Menezes de Oliveira, de 23 años, ingresó a la escuela Tasso de Silveira, ubicada en la región oeste de Río de Janeiro, a media hora del centro de la ciudad.
El hombre, un ex alumno del establecimiento, situado en el barrio de Realengo, entró a la sala donde se encontraban unos 40 alunmos. Sacó las armas y comenzó a disparar, causando la muerte de al menos 10 niños y dejando a más de 50 heridos.
"Sin decir nada, sacó una pistola de la mochila y empezó a disparar. La policía llegó y él intentó subir a la segunda planta. Cuando vio que estaba cercado, se pegó un tiro en la cabeza", explicó Dorival Porto Rafael, un trabajador del colegio.
La policía logró cercarlo, hubo un intercambio de disparos, pero al verse rodeado, se pegó un tiro en la cabeza, suicidándose.
Fuentes policiales señalaron que el agresor había dejado una carta en la que expresaba su "determinación de suicidarse después de la tragedia", como finalmente ocurrió.
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