Beto Cuevas fue el único chileno que triunfó en los Grammy Latinos

A la hora de mirar sólo las estadísticas, la realidad es categórica: Beto Cuevas, tanto en su liderazgo en La Ley como en su vida solista, es el único chileno que alguna vez ha lucido un rol protagónico y estelar en los Grammy Latinos. Anoche, el artista materializó la tendencia al ganar un gramófono en Mejor Album Pop/Rock, por su disco Transformación (2012), reafirmándose como el único representante nacional que se fue con las manos llenas. Los otros dos, Ana Tijoux, que batallaba en Mejor Canción Urbana por Sacar la voz; y Los Bunkers, quienes postulaban por Mejor Album de Rock por La velocidad de la luz, perdieron a manos de Illya Kuryaki and the Valderramas y La Vida Bohème, respectivamente.

En su caso, Cuevas derrotó a Vicentico y Tan Biónica, entre otros. El premio se suma a los que obtuvo al frente de La Ley en 2002 y 2004 y que, hasta ahora, figuraban como los únicos triunfos chilenos en el evento que se realizó en Las Vegas (sumado al Grammy de EE.UU. que el propio conjunto alzó en 2000).

Pese al logro, el hombre de Mentira no participó en la cita, ya que estaba en pleno viaje a Argentina para iniciar los ensayos de La Ley, banda con la que retornará en 2014. "Muchas gracias a mis fans y a quienes participaron en la producción de mi disco", dijo en su Twitter. De igual manera, Los Bunkers y Tijoux tampoco viajaron.

Muchas gracias a todos mis fans y a quienes participaron en la producción de mi disco "Transformación". Este Grammy es suyo también!

Eso sí, el protagonismo chileno no sólo fue de Cuevas. El miércoles 20, en la jornada sólo destinada a los distinciones especiales, Don Francisco recibió el galardón del Consejo Directivo de la Academia de la Música Latina, el que tributa la amplia cabida otorgada a los más disímiles artistas en las cinco décadas de Sábado Gigante.

"Este galardón lo debo compartir con mucha gente. Por ejemplo, las decenas de productores y creativos que desde bambalinas idearon las condiciones para promover nuevas figuras", señala el animador a La Tercera. Luego sigue: "Además, gracias a las cuatro décadas en que Valentín Trujillo estuvo en Sábado Gigante, nunca ha tenido ni 10 minutos sin música. Por lo mismo, este espacio ha sido un gran aporte a la difusión de músicos".