Carlos Larraín: "Si RN se desvía, le estaría entregando el futuro político a una figura como Velasco"
A días de dejar la presidencia del partido, avizora un duro debate sobre aborto y dice que una apertura de RN le abriría espacio a líderes como el ex ministro.
Carlos Larraín le tiene miedo a la muerte. Pero se ríe. "Me están esperando las parcas", dice. "Y le tengo santo temor a la muerte. Yo creo en que existe una vida eterna. Y sólo espero estar en buena con Dios y con los demás".
¿No está en buena con Dios y los demás?
A ratos. Usted sabe cómo es la condición humana...
¿Se angustia por eso?
No. No conozco las angustias. En general, soy de buen humor. Lo que quiero es tratar de llegar a la contemplación de Dios y no allá adonde está el coludo.
A pocos días de dejar la presidencia del partido y cerrar en su vida un ciclo de intensa exposición política, el ex senador da una de sus últimas peleas: su irrestricta oposición al aborto. Y según avizora, RN se juega mucho en este debate.
¿De verdad cree que debe ser expulsado de RN un parlamentario que vote a favor del aborto?
No dije eso. Sólo digo: ¿Puedo pertenecer a un partido que está en contra del aborto y votar a favor del aborto? Estamos contra el aborto aun con adjetivos.
¿Tras una violación también?
¿Un delito cura otro delito? ¿Qué culpa tiene un crío que viene de lo que hizo un bruto? Ninguna. Busquemos maneras de que no haya tantos abortos como se dice que hay, y que son mucho menos de los que dice el lobby abortista.
¿Cree que hay un negocio detrás de la despenalización del aborto?
Por supuesto que lo hay. No digo en todos los promotores, hay algunos que lo hacen por simple equivocación, pero que hay un negocio en torno a esto, lógico que lo hay. Y en este tema, si el partido se desvía estaría traicionando a sus bases y entregándole el futuro político a una figura como Andrés Velasco.
¿A qué se refiere?
En la medida en que el partido se secularice va a ser posible el triunfo final y definitivo del socialismo liberal. Y yo, por lo que conozco a Cristián Monckeberg y a los integrantes de su directiva, no van a cambiar esa definición.
Cristián Monckeberg plantea libertad de acción en lo valórico.
Puede haber libertad de acción en muchos asuntos, pero en el respeto por la vida no puede haber variación. Y si la hay, va a ser un partido distinto. Va a abrir la puerta a un socialista más educado que garantice las maravillas del mercado, pero que echará la cultura al trajín.
¿Ve usted en la figura de Velasco un posible líder del sector?
Andrés Velasco es una figura importante. Hay que estar atentos a lo que hace. Y nos va a prestar un servicio, a mi juicio, importante.
¿Cuál?
Va a impedir que los futuros candidatos de la centroderecha se asilen en la defensa del mercado. Porque Velasco es el mejor y más inteligente defensor de la economía de mercado.
¿Es una amenaza para Allamand, Piñera, Ossandón, Espina?
No, no lo veo como ninguna amenaza. Creo que es una realidad político-cultural que tiene un papel que cumplir en el futuro.
¿Usted lo apoyaría?
No puedo apoyar a una persona que se declara abortista sin atenuaciones.
¿Ve interés en RN por él?
No. Pero Andrés Velasco tiene un circuito hecho, no es una adivinanza. Es un dato conocido.
¿Ve interés de parte de Velasco en ocupar un rol en el centro político donde quiere llegar RN?
Lo veo bien manifiesto. El le está cortando el piso a la Concertación, porque suscribe al menos una parte de lo que dije recién, que la Concertación está extremando las cosas hasta tal punto que va a hacer fracasar... O fracasa este gobierno o estamos preparando las cosas para un súper patatús.
¿Qué le parece que Monckeberg quiera hacer alianza con la DC?
Hay que ir despacio. Hay que descubrir áreas de coincidencias y luego hay que dar los pasos políticos. Estas cosas no ocurren porque caiga un rayo del cielo, pero estimo que la tendencia tiene que mantenerse. Hay que dejarle las puertas abiertas a la DC, la veo muy incómoda en su coalición.
¿Espera tener un rol en eso?
La única pena que tengo de irme del cargo es que creo que estamos en la víspera de un rebrote sustancial de la centroderecha. Y esto causado por el desmadre de los primeros tres meses de gobierno. Es tal la exageración del programa y su ejecución, que va a provocar una reacción muy sana en la mentalidad moderada de este país.
¿Qué fue lo bueno y lo malo del gobierno de Piñera?
De bueno, una aplicación fuera de lo común al trabajo que se contagió a muchos ministros y que se concretó sobre todo en la reconstrucción. Además, su clara postura en contra del aborto. Y lo malo, un desprecio consistente por lo político. Eso impidió que el gobierno se ampliara generosamente a otras fuerzas. Si el presidente (Piñera) hubiera aceptado tener otros políticos auténticos en su gabinete, habría habido un refuerzo para el trabajo del gobierno. Ignacio Walker me dijo que él no había hablado con el Presidente Piñera en los primeros dos años.
¿Perdió la oportunidad de hacer una temprana alianza con la DC?
Al menos haber abierto la posibilidad de hacer un gobierno de concentración nacional -como se llamaban antes-, que hubiera computado el tremendo aporte de la DC. Pero eso suponía generosidad, compartir un poco el gobierno. Y a don Sebastián le cuesta mucho eso, porque le gusta el control universal. Faltó apertura.
¿Cuánto afectará la capacidad negociadora de RN el desafuero de Rosauro Martínez?
Los quórum ya están perdidos gracias a Amplitud. Lo verdaderamente grave es que hay situaciones que no pueden olvidarse, como es el caso de una actividad militar como la que dirigía Martínez, y otras que se olvidan, se condonan y se perdonan, como la internación de armas en Carrizal Bajo. En RN tenemos que apostar por la veracidad de Martínez. Yo le creo.
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