Colección de Claudio Bravo se subasta en más de un millón y medio de dólares

Crear y adquirir belleza fue una de las grandes obsesiones de Claudio Bravo. El pintor destacó desde temprano por su talento en el dibujo plasmando la belleza de los objetos reales en la tela,  y ya convertido en un artista de renombre invirtió gran parte de su fortuna en rodearse de suntuosos objetos como muebles europeos del siglo XIX, vajillas chinas del siglo XVII, tapices persas y esculturas de bronces romanos. También coleccionó arte contemporáneo, obras Francis Bacon, Andy Warhol y Pablo Picaso, que aunque se alejaron de su propio estilo demuestran su exquisito gusto estético.

Hoy en la mañana londinense, la casa Christie's subastó parte de ese legado reunido en su casa de Taroudant, Marruecos, país en el que se radicó en 1972. El lote completo  superó el millón y medio de dólares, aunque no todas las piezas fueron rematadas finalmente. La subasta se realizó por iniciativa de Bachir Tabchich, amigo y brazo derecho de Bravo, quien heredó la residencia de Taroudant y los objetos en su interior, tras la muerte del pintor en 2011 a causa de un ataque cardíaco.

Dentro de las piezas destacadas está la obra de Francis Bacon, Study from human body, subastada en US$ 45 mil, la serigrafía de Andy Warhol sobre Marilyn Monroe, vendida en US$ 4.901. una escultura de Jorge Oteiza subastada en US$ 35.943 y cuatro bustos de emperadores romanos realizadas por Rafael Cidoncha en US$ 55 mil; además de mobiliario francés del siglo XIX en precios que fueron entre los US$ 1.000 y US$ 4.000.

Una de las características  de la obra de Bravo es que nunca utilizó fotografías como base de sus obras, sino que siempre copió del original; por eso muchos de los objetos subastados hoy también están presentes en varias de sus pinturas más conocidas.