Críticas a la conducción y alto rating marcaron la primera noche festivalera

El debut del evento veraniego estuvo marcado por las más de dos horas de show de la banda mexicana, que promedió 30,2 puntos y el peak de 44 puntos que alcanzó el regreso del humorista nacional.




Con una puesta en escena realizada por el Circo del Mundo y pasadas las 22:00 horas comenzó el espectáculo de obertura de la primera noche del Festival de Viña del Mar 2013, la que además contó con la presentación del tenor Tito Beltrán y la soprano Patricia Cifuentes, quienes interpretaron la ópera La Traviata, apareciendo desde el público.

Los encargados de abrir la noche fueron los mexicanos de la banda Maná, los que repasaron su trayectoria de más de treinta décadas con un entusiasta "monstruo", que coreó todas sus canciones durante su extenso show de más de dos horas. El grupo bajó del escenario a las 00:20 horas, obtuvo los cuatro premios y alcanzó un promedio de 30,2 puntos (la más alta sintonía de la noche, cuando La Red transmitía la entrega de los Premios Oscar 2013 y llegaba a los 3,9 puntos).

Luego fue el turno humorista chileno Hermógenes Conache, quien en los primeros minutos debió enfrentarse al descontento de los fanáticos que deseaban continuar escuchando a Maná. Pese a esto y a las críticas de los televidentes vía Twitter - los que calificaron su rutina como "fome" y "repetida" -, su presentación marcó el peak de la noche, con 44 puntos de rating. Asimismo, se llevó dos antorchas de plata y oro y se mostró conforme y agradecido por los premios. "En 1991 me pidieron que ingresara seis veces y no recibí ni un chicle. Es primera vez que recibo premios en Viña", manifestó Hermógenes.

Pasadas las dos de la mañana, subió el dúo venezolano Chino y Nacho, el cual se llevó dos antorchas, tras cantar temas como "Mi niña bonita"y "El poeta", gracias al fanatismo del público adolescente que quedaba a esa hora de la madrugada en la Quinta. El show concluyó pasadas las tres de la mañana.

CONDUCCION
Si bien los comentarios de los televidentes y analistas de espectáculos han sido más positivos hacia el animador del evento, Rafael Araneda, que hacia su compañera Eva Gómez, en general coinciden en que la conducción de la primera noche de Festival pasó desapercibida. Salvo algunas intervenciones de ambos durante las presentaciones de Maná y Hermógenes Conache, no es mucho lo que se les vio.

Algo similar pasó con la competencia internacional, de la que sólo hubo críticas hacia la presentación de la representante chilena que, por lo demás, obtuvo muy malas calificaciones por parte del jurado del certamen.

También fue criticado el vestuario de la conductora, el cual fue considerado como "poco adecuado" para la ocasión.

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