DC busca ampliar selección en colegios y tensiona discusión en el Senado

Un documento circuló la semana pasada, vía correo electrónico, entre los senadores de la DC. El texto se trata de un borrador preparado por los legisladores para delinear la postura que adoptarán a partir del 6 de enero, cuando se inicie la discusión de todos los artículos del proyecto sobre inclusión, que busca poner fin al lucro, copago y selección en los colegios particulares subvencionados.

En ese e-mail se incluyen los criterios generales que pretende imponer ese partido, luego que hoy se vote el proyecto en general -es decir, la idea de legislar- a las 10 de la mañana en la Comisión de Educación de la Cámara Alta.

Quienes han leído el texto explican que ya hay dos criterios definidos: 1) Buscar una fórmula que permita mantener algún sistema de selección en colegios que están orientados por áreas, es decir, por ámbitos como deporte, religión, arte o idiomas. Con este aspecto -explican en la DC- se busca "respetar el proyecto educativo" de los colegios, mediante una "selección no arbitraria". Aquí también incluyen en la falange la opción de permitir una cuota de selección por rendimiento, que premie el "mérito" de los alumnos.

2) Asegurar que los sostenedores que decidan vender al Estado sus establecimientos -debido a que para continuar con su gestión tendrían que transformarse en corporaciones sin fines de lucro- puedan recuperar la inversión realizada sin sufrir un menoscabo patrimonial. Junto con esto, la DC pide que el gobierno ofrezca distintas opciones para los dueños y sostenedores que deseen continuar con su proyecto educativo: arriendo, comodato o leasing.

Estos temas han sido transmitidos al gobierno en diversas conversaciones. Una de ellas se produjo hace tres semanas, cuando los senadores de la DC se reunieron con los ministros Rodrigo Peñailillo, Nicolás Eyzaguirre y Álvaro Elizalde. Y algunos de esos aspectos han sido esbozados durante el debate en el Congreso.

Si bien en la DC dicen que le enviarán al Mineduc el documento con las indicaciones que presentarán -con el objetivo de que el Ejecutivo las patrocine-, en la falange advierten que si no hay una acogida, de todas maneras impulsarán estos cambios.

PS Y PPD EN ALERTA

En el oficialismo dicen que será la selección la que concentre gran parte de la discusión. En el PS y el PPD están conscientes de la intención de la DC de mantener sistemas de selección que vayan más allá de lo que actualmente está estipulado en el proyecto, algo que ven con preocupación, lo que abrirá un nuevo foco de conflicto en el sector. Hoy, la iniciativa del gobierno sólo permite seleccionar en los denominados liceos emblemáticos, opción que fue acordada entre La Moneda y la Nueva Mayoría. El resto de los casos, sin embargo, no están contemplados. Y es que el fundamento del Ejecutivo es que las restricciones en los procesos de admisión contribuyen a la segregación escolar. Esto, de acuerdo a los niveles socioeconómicos de los alumnos y sus padres o apoderados.

En este contexto, el presidente de la Comisión de Educación del Senado, Fulvio Rossi (PS), dice que "seleccionar por mérito es, simplemente, mala fe o hacer caso omiso de los datos que nos han entregado los expertos". Y criticó que "hay sectores de nuestra coalición que no han sido capaces de comprender que no es posible mejorar la educación pública sin cambiar las bases sobre las que se construyó el sistema en los 80". En ese sentido, el parlamentario hizo un llamado al sector: "La Nueva Mayoría debe mostrar cohesión".

Desde el PPD agregan que se opondrán a cualquier tipo de selección en los colegios y que, incluso, buscarán que esa acción se revierta en el caso de los liceos emblemáticos. Así lo planteó ayer el presidente del partido e integrante de la Comisión de Educación del Senado, Jaime Quintana (ver entrevista en página 4). Atentos a esa ofensiva -que podría sumar adeptos en otros sectores de la Nueva Mayoría-, desde el gobierno ya iniciaron gestiones para evitar que se concrete.

Bajo este escenario, desde La Moneda han transmitido informalmente su intención de lograr que toda la Nueva Mayoría llegue con un 100% de acuerdo a la votación en particular del proyecto. Esto, para evitar que se repita lo sucedido en la Cámara, cuando el Ejecutivo dio libertad de acción ante las indicaciones presentadas por parlamentarios. Eso provocó que se rechazara la propuesta de un grupo de diputados de penar el lucro con cárcel, quienes después votaron en contra de la indicación del gobierno que permitía los arriendos.