Delitos sexuales en centros del Sename: 56,8% de los casos terminan sin acusados

En los últimos 10 años se registraron 427 causas por posibles delitos sexuales a niños y adolescentes en centros y hogares del Servicio Nacional de Menores (Sename). De éstos, en más de la mitad no hubo acusados.

A través de un requerimiento presentado por La Tercera, mediante Ley de Transparencia, la Unidad Especializada de Delitos Sexuales y Violencia Intrafamiliar de la Fiscalía Nacional hizo un catastro del estado de las investigaciones penales por estos casos.

El análisis incluyó las razones del término de la indagación que se ha aplicado por parte del Ministerio Público, ya sea por decisión de un tribunal o por una resolución de tipo administrativa.

De acuerdo a estos antecedentes, la mayoría de los casos que se encuentran cerrados llegaron a este estado porque la fiscalía optó por archivar la investigación (44,9%) (ver infografía), es decir, que no existían los antecedentes suficientes para que el persecutor estableciera lo que realmente ocurrió.

El segundo término que más se utilizó fue la decisión del Ministerio Público de no perseverar en el procedimiento (5,3%). Esto se aplica cuando la fiscalía no obtiene los antecedentes necesarios para formular una acusación a la persona por los hechos que fueron investigados.

En el tercer lugar de las razones de por qué se cierra una causa se debe a que se anuncia la facultad para no investigar. En este caso, la indagación prácticamente no se inicia, porque el fiscal estima que los acontecimientos relatados en la denuncia no constituirían un delito.

LA CLAVE DEL TESTIMONIO

De acuerdo a Patricia Muñoz, directora de la Unidad Especializada de Delitos Sexuales y Violencia Intrafamiliar (VIF) de la Fiscalía Nacional, "los delitos, independiente de dónde se cometan, tienen ciertas complejidades". Agregó que una de las principales dificultades en estos casos es que "obtengamos testimonios de quienes han sido víctimas de estas agresiones, que se han denunciado desde la institucionalidad del Sename u otras vías".

Esto se debe, según Muñoz, a que cuando se trata de niños de muy corta edad se hace difícil obtener la información necesaria para la investigación, por las limitaciones propias que tienen los menores para entregar ciertos datos.

Según la abogada, estos obstáculos pueden llevar a que la fiscalía tome "la decisión de término y no sea la que quisiéramos, en relación a obtener una sentencia condenatoria".

Otras dificultades investigativas que pueden determinar la no obtención de una condena se relacionan, de acuerdo a Muñoz, con "las complejidades propias del proceso y la recarga que tiene el sistema" respecto de estos casos.

A esto se suman los antecedentes estadísticos que demuestran, según Muñoz, el estándar probatorio necesario para acreditar este tipo de delitos en los tribunales. Muñoz dice que se han hecho esfuerzos que se han traducido en la reducción de salidas administrativas de la fiscalía.

SENAME: POSIBLES DELITOS

La directora del Sename, Marcela Labraña, atribuye el alto porcentaje de casos que terminan sin culpables a que "estas denuncias que interpuso el Sename son por posibles delitos. Al iniciar el proceso me imagino que la fiscalía fue evaluando cuáles eran delitos sexuales y cuáles no eran".

Labraña indica que de la totalidad de los casos, en 113 de ellos el Sename se hizo cargo de la reparación de los niños, proceso que puede durar entre uno y tres años. A esto se suman 48 casos de explotación sexual en los que también intervinieron, brindando apoyo en la reparación. En estos programas, señala que se desembolsaron $ 620 mil millones.