Denise Rosenthal habla de su primer protagónico en teleserie de Canal 13

La revelación, la Hannah Montana de Canal 13, "La Feña", que a los 18 años ya tiene dos discos editados, una serie televisiva propia y ahora es una de las protagonistas de la próxima teleserie de las 20 horas, además es segura y dice que todo esto "yo me lo merezco. Me lo he ganado porque es harto trabajo". Y con su voz de preadolescente y su nuevo look de estrella de banda juvenil rockera, Denise Rosenthal confiesa que competir en Corazón rebelde en la "guerra de las telenovelas" es su paso a las grandes ligas, "es un paso a la adultez, un cambio radical, no se compara con grabar un disco o una serie, es algo mucho más potente".

Aunque el desafío de pelear por el rating con consagrados del drama como Jorge Zabaleta y María Elena Swett en la nueva vespertina de TVN, o Héctor Noguera en la de Chilevisión, ni siquiera la pone nerviosa. "Las otras teleseries son para otros públicos y la de nosotros tiene mucha energía, los jóvenes tienen carisma, fuerza y algo que decir, se van a sentir identificados y también está la música... Es muy energizante", explica sobre la trama centrada en un grupo de escolares que forman un grupo musical.  Es la adaptación de la exitosa Rebelde way argentina y con este rol la estudiante que terminó cuarto medio en 2008 cambia de estilo.

CAMBIÓ
"Este personaje es todo lo contrario a 'La Feña', es un personaje que ella odiaría", comenta refiriéndose a la protagonista de El blog de La Feña, su serie interactiva que transmite por segundo año la red universitaria. "Es una joven que tiene rollos con su madre, es rebelde y llevada de sus ideas. Tiene muchos problemas familiares y carencias y un problema emocional súper fuerte adentro". Y Martina, nombre del papel en la producción que debuta luego de Cuenta conmigo, no es como ella, que asegura que "amo lo que hago y me llena completamente".

COMO TODA ADOLESCENTE
Frente a una posible saturación de sus fans, que verán en diferentes horarios y formatos, y el peligro de convertirse en un producto juvenil pasajero, Rosenthal contesta con su actitud positiva. "No me gusta mirar hacia el futuro, tengo que aprovechar al máximo este momento, todas las oportunidades que se me han dado, que a casi nadie se le dan. Nunca pensé que me iban a llegar a mí. Más adelante veré qué otras oportunidades se me ofrecen o buscaré algo. Ahora prefiero no enrollarme", finaliza.

Mientras responde por teléfono la están arreglando para un evento. Su jornada de grabaciones es extensa. Sin pausas. Y también este ritmo la actriz lo enfrenta con ese ánimo suyo. "Es que lo paso increíble trabajando. Por eso cuando estoy cansada, duermo. Me desconecto y salgo con mis amigas, con mi familia, hago la vida de cualquier adolescente de 18 años. Sigo siendo una mujer normal...", afirma. Con esa voz de niña todavía.