El presente de Salvador Cabañas a cuatro años del disparo que lo dejó en coma
Viviendo en la casa de sus padres tras ser estafado por su ex mujer, el jugador paraguayo divide su tiempo entre la panadería de sus padres y entrenar con el 12 de Octubre.
La vida de Salvador Cabañas cambió radicalmente la noche del 25 de enero, cuando recibió un impacto de bala en su cabeza y estuvo 23 días en coma.
En aquel entonces, era uno de los jugadores más destacados del continente. Goleador y capitán del América de México, líder de la selección paraguaya en su camino a Sudáfrica y con un futuro prometedor.
Cuatro años después, la realidad de Cabañas es muy distinta. En entrevista al diario ABC de Paraguay, el jugador contó la situación en la que vive.
Sobre su estado de salud, el padre de Cabañas contó que "el ojo izquierdo es el que tiene todavía dificultades. Cada ojo tiene cuatro cuadrantes. Él tiene dos todavía que le falta recuperar en el ojo izquierdo".
A raíz de la separación de su mujer y posterior estafa de ella junto a su abogado y ex representante, el ex jugador de Audax Italiano decidió refugiarse con sus padres y comenzar todo de cero.
"Estoy muy cómodo acá con mi familia, con papá, mamá (se llama Basilia como la abuela paterna), Clara Mabel (su hermana), a pesar de no estar todos los días con mis hijos", señaló Cabañas.
Respecto a su rutina diaria, indicó que entrena todos los días con el 12 de Octubre y además ayuda a sus padres en la panadería que les regaló.
"Sí. Estoy apoyando a mis padres, a mis familiares. Repartimos por los alrededores de Itauguá, Ypacaraí, San Bernardino. Me gusta el trabajo. La gente me reconoce y me pregunta... sobre fútbol claro. Yo les digo que me divierte mucho hacer reparto", afirmó.
"Me estoy entrenando. Mi deseo es jugar, jugar hasta donde pueda. El fútbol y mi familia son el significado de mi vida", agregó Cabañas.
Sobre el tema de su mujer y la estafa que el paraguayo habría sufrido, el padre de Salvador, Dionisio señala que "se acabó la tranquilidad en la familia. Ya no podemos esconder. Ya aguantamos mucho en silencio esperando que se den cuenta".
"Por lo visto ellos no querían, no pensaban que Salvador se iba a recuperar, digo yo, por eso hacen lo posible por mantenernos alejados para que Salvador no les reclame nada", agregó sobre el manejo de propiedades y de dineros de Cabañas.
"Lo único que está a mi nombre es la casa de Villa Aurelia. Allí vive mi ex señora con mis hijos (Santiago de 13 y Mía Ivonne de 9). Ella me amenazó ahora con una demanda por abandono de hogar. Yo creo que es para sacarme lo único que está a mi nombre", cerró el delantero.
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