En una emocionante y polémica final, la sangre azul le dio el tricampeonato a la "U"

Fue con sufrimiento, con emoción, como le gusta a los hinchas de Universidad de Chile. Los azules conquistaron en el Nacional el primer tricampeonato de su historia, tras vencer a O'Higgins en definición por penales (2-0) tras igualar con un triunfo por 2-1 la derrota en la ida.

Los azules, tras la presión inicial de O'Higgins, tomaron el control de la pelota rápidamente, aunque les costaba entrar al área. Como lo hicieron a los 13', gracias al esfuerzo de Matías Rodríguez, pero la jugada terminó en un débil remate de Gustavo Lorenzetti.

La opción más clara para la "U" fue a los 25', con Guillermo Marino eludiendo rivales y disparando a la entrada del área. El arquero Luis Marín sólo miró como la pelota pasó pegada al palo derecho.

Los dirigidos por Eduardo Berizzo apostaban a la velocidad y a forzar el uno contra uno. Pero el gol llegó de otra forma. A los 31', el juez Enrique Osses cobró mano de Marcelo Díaz y Ramón Fernández anotó de penal el 1-0.

El equipo de Jorge Sampaoli sintió el golpe, se llenó de amarillas y sufrió en defensa. Enzo Gutiérrez falló un cabezazo sin marca a los 33' y cinco minutos después, Jhonny Herrera estuvo espectacular en un mano a mano con Sagredo.

Así, el primer tiempo terminó con O'Higgins inspirado y con los azules desorientados. Nuevamente, como en la fase regular (3-0) y la ida de la final, Berizzo le estaba ganando el duelo de "bielsistas" a Sampaoli.

En la segunda parte la temperatura de la final subió rápidamente. Primero, a los 48', Osses expulsó a Sampaoli. Y a los 52', Julio Barroso encaró a José Rojas por cargar a Marín. Terminaron a los golpes y el juez le mostró la roja a los dos defensas.

Los azules asumieron aún más riesgos después de eso y O'Higgins se dedicó a contragolpear.

Y a los 65' se sumó otra polémica, cuando Osses cobró penal por falta sobre Marino. Charles Aránguiz anotó el 1-1 y el partido fue pura emoción y nada de táctica.

La "U" atacaba con todo, O'Higgins asustaba de contragolpe. Berizzo hacía tiempo con los cambios, por lo que se va expulsado.

El travesaño salvó a los celestes en un tiro libre de Marcelo Díaz (74') y a los 80', Marín se lució ante un potente tiro de Aránguiz.

Llegaron los descuentos, los cinco minutos en los que los azules entregaron el último esfuerzo. Y el premio llegó con una volea de Marino, que en el segundo minuto de alargue marcó el 2-1 y forzó los penales.

Y apareció uno de los grandes ídolos de la "U". Herrera tapó los tiros de Juan Rojas, Yerson Opazo y Enzo Gutiérrez, el que le dio el título, gracias a las ejecuciones convertidas por Charles Aránguiz y Raúl Ruidíaz. No importó el penal al travesaño de Marcelo Díaz.

La fiesta se desató en los locales y la amargura en los celestes. "Llegamos rotos", resumió Gustavo Lorenzetti para explicar la emoción que se notaba en el plantel de Sampaoli. Es que la final fue puro esfuerzo y emoción. Como les gusta a los azules. Así sumaron el primer tricampeonato de la historia del club y la estrella 16.