Estudio dice que chilenos son más empáticos que brasileños, argentinos y colombianos

Según la sicóloga ecuatoriana María Luisa Meneses, citada en el sitio www.eltelegrafo.com, la población de su país es cálida, solidaria y le gusta agasajar a amigos y familiares.

Es la fórmula -explica- por la que Ecuador aparece en el primer lugar de un ránking mundial de empatía.

Según este escalafón, desarrollado por expertos de la U. Estatal de Michigan, la U. de Chicago y la U. de Indiana, todas de EE.UU., Chile figura en el lugar 25 entre las 63 naciones medidas, por sobre países de la región como Argentina, Brasil, Colombia y Venezuela, y sólo superados por Ecuador y Perú (ver infografía).

El ránking fue elaborado por medio de una encuesta web realizada a más de 104 mil personas de todo el mundo. Según explica a La Tercera William Chopik, autor principal de la investigación, el listado se construyó sobre la base de la medición de variables como el colectivismo, la personalidad, lo emocionalmente expresivos que son los habitantes de un país, su autoestima y niveles de felicidad.

En la investigación, publicada en el Journal of Cross-Cultural Psychology, dice Chopik, se midieron dos dimensiones de la empatía: la preocupación empática ("a menudo soy compasivo con las personas menos afortunadas que yo") y la mirada en perspectiva ("a veces trato de entender mejor a mis amigos, imaginando cómo se ven las cosas desde su perspectiva").

"A continuación se tomó un promedio a nivel nacional de las puntuaciones de las personas en estas dos dimensiones y correlacionamos estos resultados con las variables disponibles en otros estudios comparativos entre distintas culturas", señala Chopik.

Wenceslao Unanue, académico de la Escuela de Negocios de la U. Adolfo Ibáñez (UAI) y director del Instituto de la Felicidad, dice que el hecho que en el ranking aparezca México en un lugar muy alto (14) al igual que Puerto Rico (16) y Ecuador, que sobresale en el primer puesto, todos países de habla hispana, hace inferir que son sociedades más empáticas. "Dinamarca se ubica en el cuarto lugar, lo que es coherente con los ránking de felicidad, lo que muestra claramente la correlación entre felicidad y empatía".

El puesto que Chile ocupa lo ubica en el tercio superior. "En relación a estos datos se podría decir que Chile es empático, que está dentro del 40% más alto de nivel de empatía, pero también se puede decir que hay más un 25% países que lo superan", señala Unanue.

Problema metodológico

La empatía, dice el experto de la UAI, era una característica sobresaliente de Chile hace 30 años. En los años 60, Chile era considerado un país colectivista, indica Unanue. Al ser colectivista un país es más empático. "En los 60 y 70 Chile era más colectivista. Fue el único país donde ganó un régimen socialista por la vía de la democracia, lo que refleja que socialmente existía esa mirada colectivista, pero en 30 años hemos cambiamos mucho", destaca.

Agrega que con la llegada del sistema de mercado y la cultura de consumo, los chilenos se han vuelto más individualistas. Y en la medida en que los países son menos empáticos, son más individualistas, aclara.

¿En qué se traduce eso? "En Chile una gran cantidad de personas no vota, y ni siquiera está interesado en ir a las urnas", explica. "No van porque no creen en el sistema, es una mirada, o no van porque son poco empáticos con aquellos que necesitan el cambio, no se ponen en el lugar de aquellos que necesitan el cambio".

Por eso, el experto explica que no está del todo de acuerdo con el resultado de la investigación, resultado que se podría explicar porque en el caso de Chile, la encuesta fue respondida por 46 personas. "Lo que muestra que la encuesta tiene un sesgo de selección, es decir, respondieron personas interesadas en el tema y que pudieron llegar a la página web de la encuesta. 46 es poco en relación a países que respondieron siete mil u ocho mil personas".

Pero Chopik señala que hay que tener en cuenta que las culturas están cambiando constantemente, "por lo que la clasificación de hoy podría ser muy diferente incluso cinco o diez años más tarde, pues los países cambian rápidamente".

Lo que sí destaca Unanue de la medición son las ventajas de la empatía. "Las personas más empáticas son más pro sociales, ayudan más a los otros y a la sociedad. Además, son personas que tienen un mayor nivel de estabilidad emocional y son más felices".