Fuguet lleva a la universidad el cine pop de John Hughes

El autor, que este mes estrena el filme Invierno en BAFICI, dirige ciclo gratuito sobre el director de El club de los cinco en la UDP.




En El club de los cinco, el director norteamericano John Hughes tomó estereotipos de la secundaria y los encerró en un lugar común: aquel castigo que los norteamericanos llaman "detención". Obligados a convivir, los personajes van develándose más complejos y ricos de lo que las etiquetas ociosas les permitían.

Para el escritor y cineasta Alberto Fuguet, El club de los cinco  es la cumbre de los intentos de la cinematografía de Hughes por subvertir los arquetipos del cine de adolescentes, al mismo tiempo que actúa de influencia y antecedente de películas como Ni idea (1995) y Las ventajas de ser invisible (2012). "Hughes es un cineasta de ritmo europeo", dice el autor de Mala onda, "sus películas son  más contemplativas".

Por eso Fuguet eligió al taquillero director para realizar el primer ciclo fílmico de cinco que curará para la Universidad Diego Portales este año, los que serán gratuitos y abiertos al público. La muestra se llama John Hughes, antes y después: la secundaria y los suburbios, que proyectará las cintas El club de los cinco (1985) y Se busca novio (1984).

"Queremos darle un tratamiento de clásicos a películas que no lo son y dejar el miedo a llevar cultura pop a la universidad", explica el escritor y cineasta sobre las intenciones de los ciclos, que se harán de nuevo en mayo, junio, octubre y noviembre. "El próximo va a ser sobre la moral Moroder, a partir de la influencia estética que (el compositor y productor) Giorgio Moroder logró desde Hollywood", adelanta.

"La idea es buscar conceptos arbitrarios. Queremos hacer otro ciclo sobre gente que maneja de noche, donde pueden estar Michael Mann, el remake de El jugador con Mark Wahlberg, The driver con Ryan O'Neal o Vivir y morir en Los Angeles", explica. En las exhibiciones se repartirán folletos con monografías redactadas por el propio Fuguet, que analizarán el diálogo de las películas con la cultura en general. Además, el autor asistirá a algunas funciones para comentar las cintas.

FILMANDO LIBROS

Fue con Se arrienda (2005) que Fuguet pasó de cinéfilo a cineasta, y con el corto 2 horas (2009) y el largometraje Velódromo (2010) dio con el concepto de "cine garaje", con el que transformó el filmar en digital y con bajo presupuesto en un discurso artístico.

"Yo siento que el cine es un arte y que tiene dos ángulos irreconciliables: uno de autor y otro de cine industrial", explica. "Creo que se pueden hacer películas buenas y no vivir de ellas, y eso no tiene nada de malo", cierra, haciendo palabras los hechos: desde 2009 mantiene Cinépata.com, que actualmente es un archivo donde se puede ver gratis su filmografía y la de varios realizadores nacionales.

Es al mismo sitio, que comparte nombre con el libro de 2012, donde ha de  subir Invierno, una película coral sobre el mundo de los escritores que estrenará en el festival argentino de cine independiente BAFICI el 18 de abril.

Con una duración de 290 minutos (casi cinco horas), Invierno cuenta en tres partes la historia de Alejo Cortés (Matías Oviedo), un autor que escribe su segunda novela, Caída libre, sobre el mundillo literario. La cinta, que incluye en el elenco a Katherine Salosny y a Pablo Cerda, habitual en sus películas, está filmada mayoritariamente en interiores y ha sido definida por Fuguet como una "novela fílmica" o una "película en prosa". La banda sonora incluirá al ascendente dúo Marineros y a los argentinos El Mató a un Policía Motorizado.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.