Istomin le gana a Djokovic y a la vida

Denis Istomin

En 2001, sufrió un accidente automovilístico camino a un torneo futuro en la capital de Uzbekistán. Estuvo 2 años sin tomar una raqueta pero su madre y entrenadora, Klaudiya Istomina, sacó adelante a "Deni". Esta es la historia de superación del tenista que hoy, hizo historia en el Australian Open.




La devolución de Novak Djokovic vuela, vuelta tanto que se va larga. De inmediato, Denis Istomin se echa hacia atrás lanzando un grito al cielo. Un grito de felicidad que contrasta con la compleja vida que le ha tocado vivir al nacido en la antigua Unión Soviética.

Era 2001 y "Deni" se aproximaba a disputar un torneo futuro en Tashkent. Sin embargo, el destino se opuso. Un accidente automovilístico lo tuvo 2 años sin pisar una cancha de tenis ya que sufrió la fractura una de sus piernas. 80 puntos de sutura sufrió la promesa por ese entonces del deporte uzbeko. "Nunca pensé que volvería a jugar al tenis", declararía en reiteradas ocasiones el tenista. Solamente gracias a la rápida asistencia médica, es que Istomin pudo volver a tomar una raqueta y convertirse entre otras cosas, en el primer uzbeko en ganar un torneo ATP cuando se coronó en el pasto de Notthingam en 2015.

Pero la vida da revanchas y de qué manera. Hoy, en el abierto de Australia donde su mejor resultado había sido tercera ronda en 2010 y 2014, derrotó por primera vez a Novak Djokovic y de paso, logró su segundo triunfo ante top ten.

Otra de las particularidades del tenista que hoy está en el centro del mundo tenis, es que su mamá es la entrenadora. Se trata de Klaudiya Istomina, tenista de la década de los 80' que se hizo cargo de la carrera de su hijo. "Hace lo mismo que otros técnicos. Pelotea conmigo, hablamos de estrategia, pule mis golpes. La única diferencia es que estoy seguro de que se preocupa sólo por mis resultados y no por el dinero. Mi madre no cobra", indicaba "Deni" antes de disputar su duelo de segunda ronda ante Rafael Nadal en el Us Open de 2010.

El uzbeko buscará alcanzar por primera vez los octavos de final del Australian Open. En frente estará Pablo Carreño-Busta, pero sin importar el resultado, la historia de Istomin es atractiva y de superación. El tenista ya le ganó a la vida sin dudas.

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