J Balvin: "Llevo once años preparándome para el Festival de Viña"

El cuento de hadas que protagoniza José Osorio Balvin pudo haber tenido otro desenlace a mediados del año pasado, cuando el avión privado en el que viajaba junto a su familia no logró despegar de la pista y terminó metiéndose a la selva de Bahamas a más de 300 kilómetros por hora. Milagrosamente, ningún tripulante resultó herido tras el accidente, del que el cantante colombiano, uno de los líderes de la nueva camada de estrellas del reggaeton y su exponente más popular en la escena anglo, salió sin secuelas, más allá de una leve fobia a volar y una renovada fe cristiana que se encarga de explicitar en cada respuesta que da a La Tercera, al otro lado del teléfono desde su natal Medellín.

"El 2016 fue un año de muchas bendiciones", cuenta J Balvin (31) a modo de resumen de los últimos doce meses de su carrera, en los que lanzó el exitoso Energía -mejor álbum urbano en los Grammy Latinos 2016 y triple disco de platino en el mercado chileno- y consolidó una propuesta que lo ha distinguido de otros colegas del circuito. Una que ha dado pie a colaboraciones con artistas como Pharrell Williams y Justin Bieber, presentaciones en escenarios improbables como el Festival de San Remo, además de su nombramiento como embajador del New York Fashion Week que se realiza por estos días. "Todo esto ha sumado y nos ha dado muchas bendiciones para que esta carrera tenga cada vez más credibilidad y respeto", comenta.

A dos meses de su último paso por Chile, como parte del cierre de la Teletón en el Estadio Nacional, el intérprete de Ginza prepara su regreso para fines de este mes como uno de los platos fuertes de la próxima versión del Festival de Viña, evento con el que estuvo en conversaciones para ediciones anteriores. Será la primera vez en la Quinta Vergara para el solista, quien abrirá la noche final con un show de grandes proporciones con el que espera, según confiesa, romper todas las marcas.

"Viña es uno de mis mayores sueños, desde que decidí ser artista. Esto no debió haber sido antes ni después y eso es lo más bonito, porque no es coincidencia: pienso que la vida es perfecta y este es el momento perfecto para llegar al Festival y dejar un buen recuerdo", comenta.

Hubo conversaciones que no prosperaron para ediciones anteriores. ¿Por qué cree que este es el momento idóneo para debutar en el Festival de Viña?

Siempre tuve la fe. Como te digo, sé que este es el momento perfecto y estoy muy agradecido por la bendición de poder ser parte de un evento muy importante a nivel mundial, no sólo para Latinoamérica. Llevo once años preparándome para este momento, once años de práctica, así que ahora estamos listos para hacer lo que tenemos que hacer. Tal vez si hubiésemos ido tres años antes tendríamos que habernos acoplado al Festival. El año pasado por ahí no era el momento pero ahora llegamos con la fuerza musical, con la banda, con más seguridad, más experiencia. Por lo mismo este trabajo nos permite no tener que cambiar el formato para actuar en Viña, porque lo venimos mostrando hace ya tres años en vivo, así que ahora es simplemente ir a disfrutar, eso es lo que me parece más bonito.

¿Cuál es su objetivo en este debut en el evento? ¿Acceder a otro público que aún no lo conoce?

Para mí llegar a Viña es un sueño, te lo repito, y lo que quiero es romper un récord, esa es una de mis metas. No sé cual ha sido el (artista) urbano que más premios ha ganado, pero vamos por eso.

Ha dicho que este año empezará a cerrar el ciclo de Energía para iniciar otro. ¿Qué se puede esperar de lo nuevo que prepara?

Yo creo que con Sigo extrañándote (el cuarto single del disco) ya cerramos el ciclo de Energía y ahora me aventuraré a reinventarme, a explorar otros sonidos y a hacer historia. Hay que ir renovándose, lo que quiero hacer con el siguiente disco es romper la barrera del inglés y el español. Simplemente que sea un disco para el mundo. Energía abrió la puerta y ahora vamos a entrar, como tiene que ser.

Su discurso siempre ha sido el de cambiarle la cara al reggaeton. ¿Cree que lo ha conseguido?

Quiero darle buena cara no sólo al género, sino que al latino. Mi idea es llevar nuestra propuesta lo más lejos que podamos, y aunque hay un par de temas en inglés que todavía no han salido, el nombre de J Balvin tiene que ser reconocido como latino cien por ciento. El haber sido invitado al New York Fashion Week, por ejemplo, como primer embajador latino, son cosas que van abriéndonos las puertas a esos niveles donde no es que no tuviéramos espacio, sino que nadie lo había intentado.

¿No siente que esos espacios que se han abierto se cierran con la llegada de Donald Trump al poder en EE.UU.?

No creo que afecte. Pienso más bien que este es el momento de unirnos. En todo momento de depresión o de oscuridad es cuando las comunidades latinas van a hacerse sentir, porque nos vamos a unir con mucha más fuerza que antes.