Kate Middleton rompe con tradición y llega a Westminster con vestido color marfil

Kate Middleton sorprendió a su llegada a la abadía de Westminster, en el centro de Londres, cuando por fin se conoció el diseño del vestido con el que se casará con su prometido, el príncipe Guillermo.

La futura duquesa de Cambridge escogió un traje color marfil con cuello de encaje diseñado por Sarah Burton -de la firma Alexander McQueen- con escote en V y una larga cola de 2,70 metros.

También apostó por un velo de tul ceñido por una diadema de Cartier de 1936, cedida para la ocasión por la reina Isabel II.
 
Esta es la primera vez que una novia de la Casa Real no usa el color blanco para su matrimonio.

Como peinado, en tanto, eligió llevar suelta su larga melena castaña, con pequeños recogidos.

Middleton había elegido tres vestidos para el día de su boda, pero finalmente se decidió por la obra de Burton.

Anteriormente, se había anunciado que el anillo de boda de la novia sería un diseño de Wartski en oro galés que fue regalado al príncipe Guillermo por su abuela, la reina Isabel II, poco después de que en noviembre anunciara su compromiso.