Kofi Annan: Un mediador que no tuvo éxito en Siria

Su última misión fue su mayor fracaso: casi durante seis meses el enviado especial de la ONU y la Liga Arabe para Siria, Kofi Annan, intentó buscar una solución al conflicto y poner fin a la violencia en el país árabe. Pero el diplomático de 74 años no logró mover a la comunidad internacional a adoptar una postura común.

En lugar de lograrse un acuerdo diplomático, los combates escalaron, mientras cientos de miles de sirios continúan huyendo del régimen de Bashar Assad. Ahora el enviado especial decidió dejar su puesto.

Durante sus años como secretario general de la ONU, Kofi Annan fue consdierado la conciencia moral del mundo.

Cuando el carismático y hábil diplomático ghanés se convirtió en 1997 en el primer africano negro en ocupar el cargo, empezó a trabajar por los pobres y los oprimidos y abogó por la paz y la justicia. Además, durante la guerra de Irak se opuso a la postura de Estados Unidos.

Pero al mismo tiempo debió sufrir más de una vez en carne propia la impotencia que aqueja a la organización internacional.

Nacido el 8 de abril de 1938, Annan trabajó casi toda su vida en la ONU. Tras estudiar en Ginebra y Estados Unidos ascendió rápidamente en su carrera diplomática y conoció la organización desde varios puestos.

En 1993 actuó como Coordinador de las Fuerzas de Paz a nivel mundial. Por propuesta de Estados Unidos, que se oponía a un segundo mandato del entonces secretario general Butros Butros-Ghali, Annan fue elegido en el cargo en 1996.

Desde ese cargo logró dar una nueva cara a la organización, endeudada y considerada inactiva. Cinco años después se había ganado tal fama internacional que su reelección careció de controversia alguna. En 2001 obtuvo junto con la ONU el premio Nobel de la Paz, detalla Dpa.

SUS DESCARGOS
Al anunciar hoy su partida, Annan aprovechó de lanzar sus dardos contra el Consejo de Seguridad de la ONU.  Advirtió que la "clara ausencia de unidad" en esta instancia y la "creciente militarización" cambiaron "fundamentalmente las circunstancias para un eficaz ejercicio de mi rol". Sostuvo que sin una "presión internacional seria, decidida y unida es imposible para mí y para cualquier otro".

"Estoy seguro que Ban Ki-Moon encontrará a alguien que podrá hacer un mejor trabajo que el mío", prosiguió el ex secretario general de la ONU. 

"Puede haber otro plan, otro enfoque que pueda funcionar de manera bastante eficaz.  Pero ahora tengo la sensación de que necesitamos concretar una transición política que considere a todos los grupos en Siria", apuntó Annan, cita Ansa.