La desconocida versatilidad de Guede que ilusiona a Colo Colo

Si algo caracterizaba a los equipos dirigidos por Pablo Guede era su vocación ofensiva a prueba de todo. Así, por lo menos, lo había demostrado en Palestino y San Lorenzo.

Sin embargo, el argentino ha exhibido otra faceta en Colo Colo. Ha sabido transar, mostrando una versatilidad interesante y desconocida hasta ahora, y que ayer sufrió en carne propia Universidad Católica.

A mediados de agosto, cuando las derrotas en el Monumental ponían dudas sobre su proceso, el DT concluyó que los albos no se acomodaban al fútbol suicida que él suele practicar. De hecho, aquella vez admitió, públicamente, que "quería bajarle un cambio" al equipo.

Le costó, pero lo logró. El Cacique empezó a ganar y ya no perdía tan fácilmente. ¿Cómo lo consiguió? Haciendo que su escuadra se demorara un poco más en llegar al arco, pero controlando más el balón; haciendo que se preocupara tanto de defender como de atacar. No fue todo. También pasó a línea de tres en la zaga y ubicó a Luis Pedro Figueroa en el mediocampo, un jugador cuyo buen nivel le dio el equilibrio que estaba buscando.

Este desapego al dogma táctico quedó en evidencia anoche en San Carlos de Apoquindo. Guede, el ultra ofensivo, no tuvo ninguna vergüenza en mandar a sus pupilos a la cancha a esperar a la UC, a aguantarla, siempre en el marco de una estrategia bien urdida, porque Colo Colo siempre estuvo bien parado y férreo atrás, muy atentos para aprovechar los espacios que dejarían los cruzados en el fondo.

El Cacique llegó pocas veces al arco de Costanzo, muchas menos que al de Toselli en el duelo del Apertura. Pero logró que el conjunto de Salas no llegará casi nunca. Y, lo más importante, está vez logró el triunfo. De paso, avisó que este Colo Colo ya no es el equipo predecible de las primeras fechas. Ayer, su planteamiento superó (y sorprendió) al del Comandante, cuyo equipo no mostró variantes tácticas respecto a lo que hace siempre.

"Hicimos un buen partido, haciéndonos fuertes defensivamente, logrando casi que la UC no nos genere ocasiones y, a partir de ahí, atacarlos pausadamente y no tanto al golpe por golpe, porque ellos son muy buenos en eso. Lo que nos propusimos en la semana nos salió bien. A la UC no te le puedes relajar un segundo, porque en dos minutos te mete tres goles", admitió el entrenador.

El argentino continuó elogiando a los cruzados y justificando su planteo. "Tienen un poder ofensivo muy grande. Hay que respetarlos siempre, desde el primer minuto hasta el último, porque tienen veneno arriba, te hacen año de verdad. Ni con la U hicimos el trabajo defensivo que hicimos hoy con Católica. Para mí siguen siendo el mejor equipo del fútbol chileno", sostuvo.

En Macul se ilusionan con alcanzar la final de la Copa Chile. Ya dieron el primer paso. No obstante, la máxima ilusión está puesta en lo que pueda hacer Guede en 2017, con más tiempo de trabajo y conocimiento fino del plantel, considerando las buenas sensaciones de lo que ha mostrando hasta ahora.