La misión del ejecutivo que reemplazará a José Codner al mando de Fasa

Enrique Cibié conoce al dueño de Farmacias Ahumada desde 2001, cuando asumió como gerente general. Ahora ocupará la presidencia, con el objetivo de dirigir y recomponer un directorio dañado por las desconfianzas y recriminaciones mutuas.




Un desafío no menor tendrá Enrique Cibié, quien será el encargado de reemplazar a José Codner en la presidencia de Farmacias Ahumada, la mayor cadena de farmacias de Latinoamérica, con operaciones en Chile, Perú y México. Su misión, junto al nuevo directorio que se elegirá el próximo 26 de noviembre, será restablecer la paz en el deteriorado gobierno corporativo de la firma. Así lo señalan cercanos a Codner, que confirman que Cibié (en la foto superior) será el nuevo presidente de la firma.

Su elección no es azarosa. El ingeniero comercial es un hombre que conoce Fasa y al dueño del 51% de la empresa desde hace casi una década. En 2001 asumió la gerencia general, cargo que mantuvo hasta 2005. La confianza y la relación se mantuvieron: pese a dejar la firma para asumir la gerencia general de Masisa (forestal donde sigue como director), Cibié siguió conectado con Fasa como presidente de la filial en Perú y director suplente de Codner en Fasa.

Codner "considera que Cibié es un hombre con la personalidad y mirada de futuro, que necesita  Fasa", dice un cercano al dueño de la empresa. Otro profesional ligado a la compañía agrega que Cibié "es una persona que puede tender puentes. En ese sentido, puede ser un bálsamo". Y alguien así es lo que requiere Fasa, agrega, una empresa donde el directorio terminó quebrado y en el que José Codner perdió el apoyo de los directores que había elegido con sus votos, tras lo cual solicitó la junta extraordinaria de accionistas que el próximo 26 renovará la mesa directiva. Hoy sólo conserva el respaldo de Cibié, quien en su rol de director suplente lo ha reemplazado en los últimos cuatro meses, y Alejandro Rosemblatt, su yerno y vicepresidente ejecutivo de Fasa.

El rompimiento se develó el 2 de noviembre, cuando Codner pidió la remoción de todo el directorio. Ese mismo día envió un fuerte correo electrónico a sus ex aliados Alex Fernández, Jaime Sinay, Gabriel Berczely y Eduardo Bellinghauser, que Berczely respondió esta semana con dureza. Codner se molestó porque la mesa discutía poner fin al arriendo de sus oficinas y a su condición de presidente ejecutivo, cargo que le reportó $ 300 millones en 2008.

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El directorio de Fasa tiene nueve integrantes y Codner elige a cinco. Los otros cuatro los nominan las AFP y Falabella, dueña del 20% de Fasa. Codner ya tiene definidos a los nuevos integrantes. Lo único que no está claro es si el propio Codner repostulará al directorio, dicen en su entorno.

El empresario quiere que el directorio se cambie por completo y que ello incluya a los representantes de las AFP y Falabella. En el lado de Codner dicen que el retailer decidió no repostular a Juan Cuneo y Juan Benavides a la mesa, pero cercanos a ambos lo niegan y dicen que se mantendrían hasta abril cuando se realice la junta ordinaria de accionistas y la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) haya fallado en la investigación que inició tras el quiebre en el directorio. Los problemas comenzaron cuando Fasa admitió a la Fiscalía Nacional Económica (FNE) haberse coordinado para fijar precios y aceptó pagar US$ 1 millón. Los minoritarios acusaron falta de información de parte del controlador y la SVS formuló cargos contra el directorio por no actuar con diligencia.

Para ocupar los cargos disponibles, Codner escogió, dice un cercano, a directores profesionales provenientes de la academia y el mundo de los negocios. "Por lo menos dos de ellos tienen experiencia en recomponer gobiernos corporativos y eso es lo que la compañía necesita", dice. El empresario descartó, además, incorporar a sus tres hijas al directorio, las que son directores suplentes de Fasa.

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