La semana clave de Lagos para el futuro de su carrera a La Moneda

"Probablemente seré proclamado este sábado como el candidato presidencial del PPD". La frase, dicha esta mañana en Rock & Pop por el ex presidente Ricardo Lagos, constata lo que es aceptado prácticamente como un hecho en círculos políticos: que el ex mandatario y fundador del partido será ungido esta semana como la carta de la colectividad, recibiendo un respaldo formal en su intento por regresar a La Moneda.

Pero lo que hace unos meses era visto como un hito de celebración y una oportunidad de reforzar la apuesta de Lagos se ha convertido en una especie de "punto de quiebre", un proceso que el ex mandatario debe cumplir y salvar sin problemas para no ver más dañadas sus aspiraciones.

Si en octubre el escenario apuntaba a una rápida proclamación para lograr ser el candidato conjunto con el PS, el escenario actual es mucho más líquido. Porque en el socialismo las posturas están divididas, existen respaldos cruzados a los tres nombres de la colectividad que han expresado su intención de competir -Lagos, José Miguel Insulza y Fernando Atria-, e incluso hay un grupo relevante de dirigentes que apoya la opción del senador Alejandro Guillier, proclamado el fin de semana pasado por el Partido Radical.

Aún más, el amplio triunfo de la senadora Carolina Goic en las elecciones internas de la DC del pasado domingo casi asegura que la colectividad levantará un candidato propio en su Junta Nacional del 28 de enero, con Goic como el nombre más posible. Algo que aleja la posibilidad, comentada cuando Lagos se lanzó el año pasado, de que el partido le dé su respaldo.

Todos estos movimientos volvieron aún más relevante la proclamación del PPD para Lagos. No porque implique algo en cuanto a su posibilidad de participar en primarias: en la Nueva Mayoría no hay dudas de que si el ex mandatario quiere competir estará en esa papeleta, aun cuando sea con una fórmula similar a la que permitió a Andrés Velasco participar en la elección interna del bloque en 2013 pese a no tener respaldo de ningún partido.

Tampoco se prevé que el PPD nomine a otra carta o apoye a Guillier. A diferencia del PS, el único nombre que ha levantado una candidatura además de Lagos es el diputado Jorge Tarud, quien no ha logrado muchos apoyos internos en el grupo que decidirá la postura de la colectividad.

El escenario que podría dañar a Lagos es que el PPD resuelva posponer su decisión presidencial y no le entregue un respaldo explícito, lo que dejaría al ex presidente debilitado de cara al Comité Central del PS de la próxima semana, o bien que sectores internos levanten una discusión sobre la conveniencia de apoyarlo dado su estancamiento en las encuestas.

Por el contrario, una aclamación del ex mandatario en el PPD le permitiría apuntar sus fichas inmediatamente hacia el PS y poner presión para que ambas colectividades definan un candidato único, escenario que se ve como más favorable a las intenciones del ex presidente.

Pero hasta el sábado, Lagos seguirá con lo que ha realizado desde que lanzó su candidatura en 2016. Un fuerte despliegue en radios, reuniones con diferentes grupos, presencia en seminarios y un reconocimiento de que su carrera presidencial ha sido una tarea difícil. Algo que él mismo reconoció ayer entre risas, durante la presentación de la entrega final de un informe sobre el proceso de consultas ciudadanas para la Nueva Constitución en su fundación Democracia y Desarrollo: "Les pido mis excusas si esta transmutación del presidente les ha producido algún problema. Al menos a mí me ha producido muchos".