Las claves de la candidatura de Tokio 2016
MODERNIDAD Y ECOLOGIA, COMO PILARES
Tokio busca sus segundos Juegos Olímpicos, después de los de 1964, apoyado en un proyecto compacto, tecnológico y ecológico. Para graficar esto, aparece como estandarte un humanoide llamado Gundam, un héroe robótico conocido por generaciones de japoneses. Su figura de 18 metros de altura sobre césped busca atraer las miradas sobre un Tokio reverdecido, que pretende ofrecer en 2016 "el mejor escenario para los héroes" de todo el mundo.
FRIA RESPUESTA DE LA POBLACION A LA CANDIDATURA
En un estudio realizado en febrero, la candidatura sólo constaba un porcentaje de apoyo del 55,5 por ciento de la población tokiota. "El respaldo público ha aumentado de modo rápido después de la visita del grupo evaluador del COI", asegura Ichiro Kono, jefe de la candidatura local. Según encuestas independientes, del 70 al 80 por ciento de la población apoya ahora las ambiciones olímpicas de Tokio.
SOLIDEZ Y UN PROYECTO COMPACTO
Tokio no adolece de escasez financiera, algo que demuestra el presupuesto de este año del gobierno municipal, que con 73.000 millones de dólares es el más grande de todo el mundo. Los japoneses prometen los "Juegos más compactos y sostenibles de la historia". El 97 por ciento de las instalaciones se encuentran a menos de ocho kilómetros del estadio olímpico y el 70 por ciento como máximo a 10 minutos de la villa olímpica en la Bahía de Tokio.
LA INFRAESTRUCTURA MAS MODERNA Y ECOLOGICA
Diecisiete estadios serán puestos a punto para los Juegos con ligeras modificaciones, mientras que otras seis instalaciones deportivas, entre ellas el centro internacional de natación Tatsumi, será reconstruido y modernizado por completo. De los 11 escenarios restantes, cinco -entre ellos el estadio olímpico- seguirán siendo en el futuro instalaciones deportivas. Además, prometen más de 1.000 hectáreas de superficies verdes se crearán hasta 2016 en el corazón de la metrópoli de más de 12 millones de habitantes, cuya calidad del aire es ya "excelente".
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