Las gestiones del "diputado" de 10 años

Aburrido de no contar con una plaza de juegos en Chimbarongo, Mariano Abalos pidió al Presidente que construyeran una. Tras sostener reuniones con diversas autoridades, está por conseguirlo.




Disfrutar durante 10 minutos de los juegos inflables que cada verano se instalan a un costado de la plaza de Chimbarongo cuesta $ 500. Por eso, y luego de que su madre le dijera que no le podía dar dinero todos los días, Mariano Abalos, de 10 años, concluyó que no era tolerable que en su localidad, de 35 mil habitantes, no existieran suficientes equipamientos públicos para niños. Sin consultarlo con ningún adulto, razonó que el tema debía hablarlo con alguna autoridad. Quizás la máxima autoridad. En marzo de 2012 envió una carta al Presidente.

"Pensé que él, que es el manda más, podría solucionar este problema. Yo sabía, por una publicidad, que en una página web se le podían mandar cartas", comenta. "Los juegos inflables se ponen sólo en el verano y hay que pagar. Sin ellos, no nos queda más que jugar en la calle, pero es peligroso por los autos. La verdad es que nunca hacemos mucho ejercicio", añade.

Tres meses después de esa secreta gestión, su madre, Cecilia Guerrero, quedó sorprendida cuando recibió un e-mail desde la Gobernación de San Fernando. La citaban a una reunión para hablar del "proyecto" de su hijo. "Nos recibieron, hablamos con una persona. Estaban interesados, pero quedó en nada", dice la madre.

Triste, pero no desanimado, Mariano Abalos volvió a escribir al Presidente Sebastián Piñera, en mayo. Esta vez detalló las necesidades de contar con una plaza en la ciudad y especificó dónde debía ubicarse: un sitio eriazo de la Villa Miraflores. De paso, solicitó un viaje con sus compañeros para conocer La Moneda.

"En términos muy cordiales, sugiere lo de la plaza. Nos llamó la atención que en la petición se preocupaba de los demás y no sólo de él", plantea Felipe Alessandri, encargado ciudadano de la Presidencia, entidad que recibe cerca de 500 peticiones diarias.

Tras esa última gestión, desde La Moneda designaron al intendente de O'Higgins, Wladimir Román, para que resolviera la solicitud. Se asignaron recursos del Fondo de Desarrollo Regional; Abalos planteó qué tipo de juegos y equipamiento debería tener el futuro espacio, y ahora sólo falta que la municipalidad presente el proyecto al gobierno regional.

Según estiman en la alcaldía, en cuatro meses la primera plaza de juegos de Chimbarongo estaría funcionando. "Lo han tratado como a un adulto. Siempre ha sido habiloso, pero lo que hizo se sale de lo común. Se está transformando en algo tangible", agrega la madre.

Hoy, la historia de las cartas de Mariano Abalos -quien cursa quinto año en el Colegio San Nicolás, y terminó el primer semestre con un 6,2 de promedio- ya trascendió en su comunidad: llegaron felicitaciones por Facebook, en su colegio lo han recibido con aplausos y en la radio local se comentó su inusual cometido. Cuando fue a las oficinas de la intendencia, en Rancagua, los funcionarios lo llamaban el "niño diputado".

"El intendente le sugirió que era más interesante conocer el Congreso que La Moneda, y dijo que se contactaría con el diputado Javier Macaya para eso. Además, a raíz de lo que hizo, para el Día del Niño instalarán juegos inflables gratuitos en el sitio donde se construirá la plaza", añade Guerrero.

En la municipalidad afirman que cuando se construyó la Villa Miraflores, hace 15 años, siempre se pensó que en el sitio eriazo, de 300 metros cuadrados, se emplazaría una plaza, pero nunca se concretó. "Chimbarongo tiene una falta de juegos infantiles y algunos vecinos estaban interesados en utilizar ese sitio", dice Maurice Dintrans, director del Secpla. "El proyecto toma una semana en ser elaborado, después se presenta y en 30 días deberían aprobarlo. Luego se licita y en cuatro meses estarían comenzando las obras", detalla.

Mariano Abalos, quien vive junto a su madre y dos tías, quiere estudiar Astronomía y le gusta la historia. "Me llama la atención cómo era la vida antes, cuando no existían los adelantos tecnológicos", dice. Además, señala que le agradaría conversar alguna vez con el Mandatario. "Quiero decirle lo que le falta a Chimbarongo y a Chile. Creo que en el país debe disminuir la delincuencia", asegura.

Ahora, los intereses del "diputado Abalos" se han ampliado. "El otro día fui a Curicó y entré a un planetario móvil. Pensé que podía ir a Chimbarongo. Quiero lograr eso", recalca.

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