Las últimas noches del Hotel Valdivia
El hotel parejero más famoso de Santiago cerrará sus puertas al público el 12 de mayo. Antes del 30 de junio, sus 48 piezas temáticas estarán desmanteladas. Será el fin de 54 años de historia.
LEONOR muestra cuatro dedos cuando le preguntan el tiempo que lleva trabajando en el Hotel Valdivia. Con ese gesto no se refiere al número de años, sino que al de las décadas en las que ha sido parte del personal del recinto para encuentro de parejas más famoso de Santiago.
Ana, la cajera, y Ramón, el chofer, llevan 46 años. "El lleva más tiempo. Yo llegué en marzo y él en enero", explica en voz baja. Incluso Luisa Mella, hija de la fundadora Coralia Quezada, va sagradamente a monitorear el negocio familiar cada día, pese a sus 73 años.
Todos son testigos de gran parte de la historia del lugar y en un mes y medio lo serán de otro hito. El 12 de mayo el Hotel Valdivia cerrará sus puertas definitivamente al público después de 54 años. El lugar que ha sido ocupado para películas, fotografías y eventos de marcas, recibirá a sus últimos pasajeros esa noche.
Los propietarios del "Valdivia" deben entregar el espacio que ocupan actualmente en la comuna de Ñuñoa el 30 de junio a la Inmobiliaria Fundamenta. Esa empresa construirá dos torres de 29 pisos con 6oo departamentos en total y una cifra similar de estacionamientos subterráneos. Todo sobre el paño de 5.200 m2 que se ubica entre Av. Bustamante y las calles Mujica y García Valenzuela.
"Va a ser duro cuando tengamos que sacar todo. Desde niños veníamos a jugar acá y siempre fue parte de nuestras vidas", comenta Abelardo Mella, gerente general y nieto de la fundadora.
Después del cierre todavía existirán algunos compromisos por cumplir. Entre el 13 y el 26 de ese mes se realizará una serie de eventos privados con empresas que han solicitado arrendar el espacio antes de que desaparezca. Finalmente, se bajará la cortina con una fiesta de clausura.
"Queremos hacer una celebración para despedir un espacio que ha sido importante para la familia durante más de cinco décadas", comenta Mella.
En paralelo a los eventos se desarrollará un remate de gran parte de los accesorios de las 48 piezas del inmueble. Las visitas de los interesados se realizarán a partir de mediados de mayo y a finales de ese mes un martillero público determinará el destino de los objetos que contiene cada uno de esos espacios temáticos.
El gerente comercial Guillermo Mella explica que la ubicación del nuevo hotel se determinará en abril y tras esa decisión se definirá el destino de los elementos que actualmente decoran al Hotel Valdivia. La nueva casa debería estar ubicada en Ñuñoa o Santiago Centro.
"Antes de que cerremos tenemos que contar con el nuevo lugar donde nos instalaremos. Ahí replicaremos algunas piezas, pero como el recinto será más pequeño, recién cuando lo concretemos vamos a determinar las cosas que nos llevaremos y las que saldrán a la venta", explica.
A comienzos de junio los nuevos dueños de los objetos deberán retirarlos y ahí comenzará el proceso de desmantelamiento del recinto. Según las estimaciones de los encargados, ello debería durar hasta fines de junio, la fecha límite acordada con Fundamenta para salir del lugar.
El hotel creado en 1959 se hizo famoso por la decoración de sus piezas: estilo Moro, Hindú, Egipcio, Ecológica y Onda Disco, entre otras.
Para las últimas semanas de operación se ha preparado un plan esclusivo para los clientes que lo visiten . "Tendremos cenas especiales relacionadas con las temáticas de las piezas y, además, se entregarán souvenirs como calendarios o llaveros", explica Abelardo Mella.
El plan final de actividades además incluyó una serie de tours los días lunes, entre enero y marzo. Cerca de 200 personas participaron en los recorridos que se hicieron por los espacios más emblemáticos del hotel.
Cada lunes se juntó a un grupo de 10 personas, pero debido a la alta demanda que ha tenido el lugar antes de su cierre, los paseos se suspendieron.
"Llegaron familias, personas de edad muy avanzada y jóvenes. Fue sorprendente para nosotros ver la importancia que tiene para algunos el hotel", comenta Guillermo Mella.
Abelardo Mella concluye: "El esfuerzo ha sido muy grande con el fin de transportar a nuestros clientes a otros lugares del mundo y lo hemos conseguido".
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