Los vacíos que dejó la muerte de Julio Grondona
La Conmebol debe designar al nuevo vicepresidente de FIFA. En la AFA lo sustituirá Luis Segura. En octubre debe llamar a elecciones.
La frase más repetida después del deceso de Julio Grondona fue que "deja un gran vacío". Una apreciación que, al margen de la evaluación de su gestión como vicepresidente de la FIFA y en la testera de la Asociación del Fútbol Argentino, abre el espacio a la disputa por los dos cotizados puestos que ocupaba.
En la organización que rige al fútbol mundial, su reemplazante deberá decidirlo la Confederación Sudamericana, que mantiene el derecho a designar al primer vicepresidente.
El actual timonel de la Conmebol, el uruguayo Eugenio Figueredo, y el brasileño Marco Polo del Nero, quienes actualmente forman parte del Comité Ejecutivo tienen ventaja para asumir el cargo. El puesto del primero no es incompatible con la función en Zurich. De hecho, el timonel de la UEFA, Michel Platini, ocupa una de las vicepresidencias.
El mecanismo para la nueva designación debe ser resuelto por las asociaciones que componen el bloque continental. Podría tratarse de una votación o, simplemente, de una designación consensuada.
El sucesor de Grondona no necesariamente debe ser argentino, aunque José Luis Meiszner, actual secretario general de la Conmebol, es mencionado como una de las cartas.
Menos chances reúne Sergio Jadue. El timonel de la ANFP, tercer vicepresidente del organismo sudamericano, es bien evaluado en el contexto regional, pero, según explica un cercano al organismo global, "es muy temprano para que dé ese paso. Sobre él, por un tema de antigüedad están el venezolano Rafael Esquivel, el ecuatoriano Luis Chiriboga, el peruano Manuel Burga y el boliviano Carlos Chávez".
El escenario ni siquiera había sido analizado, porque la partida de Grondona fue sorpresiva. "No había señal alguna de que pudiera producirse una situación así. Ni siquiera una enfermedad", explica la misma fuente.
Segura en la AFA
El presidente de Argentinos Juniors, Luis Segura, asumirá la conducción de la AFA. En octubre, deberá convocar una asamblea para llamar a elecciones en un plazo de 90 días.
"Es casi imposible reemplazar un liderazgo como el de Julio. Lo que sí se producirá será un cambio en la estructura. Buscaremos una organización más horizontal, en la que los clubes más ordenados en el plano administrativo pasemos al frente", afirma Julio Baldomar, vicepresidente de Vélez Sarsfield.
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