Lucha contra el narcotráfico desata fuerte debate en Argentina
El secretario de seguridad se mostró ayer a favor de la legalización de la marihuana.
El tema del narcotráfico en Argentina ha desatado una polémica que ha salpicado ayer a altos cargos del Ejecutivo y que ha puesto de manifiesto las diferencias internas existentes en el gobierno de Cristina Fernández. El jefe de Gabinete del gobierno transandino, Jorge Capitanich, aseguró ayer que "Argentina no es un país productor de droga", en sintonía con el secretario de Seguridad, Sergio Berni, y en contra de lo manifestado recientemente por el ministro de Defensa, Agustín Rossi. Capitanich dijo que la posición oficial del gobierno sobre el narcotráfico "es clara y contundente" y que se lleva a cabo una "política activa" para combatirlo.
Sus declaraciones contrastan con las manifestaciones del ministro de Defensa, Agustín Rossi, quien dijo a una radio que "Argentina era un país de tránsito, y ahora es un país de consumo, y lo más grave que también es de elaboración".
Berni, máximo responsable de la lucha contra el narcotráfico, señaló que Argentina ocupa un lugar secundario en la transformación de la coca en clorhidrato de cocaína y en la elaboración de drogas químicas. El diputado opositor Maximiliano Pullaro lo contradijo y apuntó que en Argentina "se recibe la droga, se la estira, se la refina, se la distribuye y hasta se la exporta". "Argentina es el tercer país exportador de cocaína en el mundo", dijo Pullaro a una radio local. Pero el secretario de Seguridad abrió ayer otro debate al mostrarse convencido de que no es posible combatir al narcotráfico sólo por la vía judicial y citó al fallecido narcotraficante colombiano Pablo Escobar.
"Escobar decía que no hay posibilidades matemáticas de que la persecución policial pueda contra el narcotráfico. Y es verdad, porque la lucha tradicional... es la guerra del gato y el ratón", afirmó. A título personal, Berni se mostró a favor de despenalizar la producción y comercialización de marihuana, como ha hecho Uruguay.
En el último año, varios escándalos por la presunta connivencia entre fuerzas policiales y redes de tráfico de drogas en las provincias de Córdoba y Santa Fe, el auge de los homicidios por ajustes de cuentas entre bandas y las críticas de la Iglesia han puesto al narcotráfico en la agenda gubernamental.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.