Marcela Sabat tras municipales: "Me da tanta rabia que comparen a Labbé con mi padre"

La diputada Marcela Sabat (RN) afirmó hoy que no existe un punto de coincidencia entre la salida de su padre, el alcalde de Ñuñoa, Pedro Sabat, y lo que representa Cristián Labbé en Providencia.

Al respecto, la parlamentaria dijo en radio ADN que  "me pidieron que apoyara a Cristián Labbé. Se me acercó la directiva de mi partido, y dejé claro que por una cuestión de principios yo no lo iba a apoyar. No por una cosa personal ni por la reacción que tuvo ayer. Es por un problema que tengo desde que ejerzo el cargo, que su forma de ser nunca fue abierta ni me dio la opción de entrar a la comuna. Y esa para mí es una obligación, no me dejó hacer mi gestión ni hablar en forma libre con la gente de Providencia".

Asimismo, agregó que "diputados UDI de este mismo distrito me dijeron 'Marcela, en esta comuna no pienses entrar, no sigas en la lucha porque la única autoridad válida es el alcalde Labbé'".

"Su forma de hacer política le pasó la cuenta, de cómo actuar, de creer que esto es un fundo y yo mando, yo digo, yo hago, eso no es así, y por eso me da tanta rabia que comparen a Labbé con mi padre, son dos seres tan distintos", afirmó Sabat.

Según remarcó, "mi padre nunca estuvo en la DINA, nunca preguntó de qué partido político era una persona cuando la quiso ayudar, y jamás preguntó el partido de mucha gente que trabaja con él".

Sobre Labbé, agregó que "él sabe perfectamente que se cometieron crímenes, pero tampoco puede renegar de su historia y tampoco lo puedo enjuiciar a él, somos generaciones distintas. Fue un alcalde designado justo".

En relación con los resultados de la Alianza en los comicios, Sabat adujo que "la gente de derecha se abstuvo tanto" porque "está descontenta con el gobierno, está viendo un gobierno arrogante que no es capaz de hacer un mea culpa".

Consultada por los índices de abstención del proceso electoral, Sabat aseveró que "este 60% que no votó este domingo es un claro castigo a los políticos. Es una señal clara de que nosotros tenemos que ponernos las pilas y definitivamente empezar a mandar señales concretas, y no cosas al voleo y estar peleando por tonteras".

La diputada RN expresó que "no importa tanto haber perdido una municipalidad. Aquí lo que importa es que ojalá la gestión siga ocurriendo, que la gente siga recibiendo la ayuda y no se desampare".

En cuanto al recambio que se da en Ñuñoa, comuna donde Sabat deja el cargo, la diputada planteó que "mi padre estima mucho a Maya Fernández, sabe mucho de lo que ella ha tenido que enfrentar y sufrir en la vida, le tiene mucho respeto. Hay que tomar esto con todas sus aristas, no solamente en lo que nosotros nos equivocamos, sino que también el mérito de la candidatura que ella tuvo y el porcentaje que sacó".

La hija del alcalde Sabat explicó que "él siente que ya cumplió un ciclo, el también cree que 16 años es mucho. Cuando todos dicen que es un alcalde eterno, él efectivamente creía que era mucho, lo que pasa es que no logramos encontrar a esa persona que continuara con esa gestión".

"Nadie le puso una pistola en la cabeza para que aceptara, pero sí le costó mucho tomar esa decisión", aseguró, afirmando que "la política cambió y él se da cuenta perfectamente de eso, él sabe que no encaja en esta nueva política de fiscalización ciudadana mucho más fuerte, y no es que no le guste, él es de otra generación nomás".

A su vez, destacó que "aplaudo la consecuencia de Andrés Allamand, que por supuesto es mi candidato. Cumplió su palabra y no abrió el espacio para que se diera a entender que él iba a participar en algún tipo de proclamación política".

Sabat planteó que "cada alcalde tiene que hacer su mea culpa, tal como lo hizo mi padre, tal como lo tendrá que hacer Zalaquett, y como lamentablemente no lo hará Labbé".

"Tengo una muy buena relación con la Josefa Errázuriz porque ella me ayudó muchísimo cuando yo comencé mi candidatura. En el minuto que tuvo el respaldo del movimiento de Giorgio Jackson, yo me tuve que alejar", finalizó la parlamentaria.