Más de 70 mil jóvenes participan en peregrinación al Santuario de Santa Teresa de Los Andes

Una masiva peregrinación realizaron hoy al Santuario de Auco más de 70 mil jóvenes inspirados por la vida y testimonio de Santa Teresa de Los Andes.

Durante la eucaristía celebrada por el arzobispo de Santiago, cardenal Francisco Javier Errázuriz, los  fieles, provenientes de todo Chile, se comprometieron para transformarse en "luz de Cristo para el mundo".

"Queremos ser luz del mundo por nuestro espíritu de servicio, además porque queremos sembrar esperanza y alegría. Ustedes saben cuánta gente realmente no vive a plenitud el hecho de ser cristiano, en cuántos de ellos no hay alegría y en cuántos de ellos se percibe indiferencia y tristeza. Nuestra misión, entonces, es que también ellos sean luz del mundo y por eso nuestra labor es conducirlos a Jesús", dijo el cardenal.

Cuatro jóvenes copiaron el Evangelio de Chile en la cumbre de la Cuesta Chacabuco. A raíz de ello el cardenal recordó "el gran regalo" que la Iglesia quiere hacerle al país, ahora en tiempos del Bicentenario.

"El obsequio para Chile es que seamos Evangelio vivo, que esa palabra que escribieron los jóvenes sobre esa hoja sea palabra escrita en nuestra vida, en nuestro corazón y en nuestras acciones. Queremos ser luz del mundo precisamente haciendo que el Evangelio viva en nuestra patria y que nuevamente la cultura entera sea un espacio de amor, de esperanza, de justicia, de paz y de verdad", expresó.

De acuerdo al vicario de la Esperanza Joven, padre Galo Fernández, en esta edición la peregrinación buscaba favorecer en los fieles un itinerario espiritual iluminado en la santidad de la carmelita, que los animara a disponer sus corazones para transformarse en luces del Evangelio sobre la Tierra.

La actividad también pretendía renovar el compromiso misionero de los jóvenes y sumarse al Domingo Universal de la Misiones. Por ese motivo se escogió para esta edición el lema "Luz de Cristo para el mundo", que nace del mensaje del Domingo Universal de la Misiones, entregado por el Papa Benedicto XVI para este año.