Miami y San Antonio buscan desequilibrar la llave en el quinto partido de la final

Los "Spurs" jugarán el último partido en calidad de locales con la intención de romper el 2-2 y aventajarse en la serie definitoria.




Los Spurs de San Antonio y los Heat de Miami jugarán hoy el quinto partido de las finales de la NBA con el base francés Tony Parker y el escolta argentino Manu Ginóbili como centro de atención.

Parker, el hombre clave en la creación de juego y ataque de los Spurs, sigue sin poder entrenar con normalidad y reconoció ante los periodistas que su tirón muscular que sufre en la pierna derecha le puede generar en cualquier momento el "desgarro" del tendón.

El jugador francés, que en el cuarto partido aportó 15 puntos, todos conseguidos en la primera parte, pero falló los cinco tiros que hizo a canasta en la segunda, admitió que sigue con las molestias y "puedo sufrir un desgarro en cualquier momento".

Los Spurs deben aprovechar el tercero y último partido que disputan en su campo del AT&T Center y Parker es consciente de esa realidad ya que una derrota los dejaría con muy pocas opciones de conseguir dos triunfos consecutivos cuando regresen a Miami para jugar el sexto y un séptimo si fuese necesario.

"Tengo que arriesgarme y si se da el desgarro, así es la vida", admitió Parker, que sufrió el tirón en el tercer partido cuando los Spurs ganaron por paliza de 113-77.

Los Spurs también esperan por una subida en el rendimiento de Ginóbili, especialmente en el apartado ofensivo.

El argentino, que está muy lejos de ser el jugador decisivo que hace diez años, es consciente de la necesitad que el equipo tiene de su mejor aporte, sin el cual será muy difícil que puedan ganar el quinto partido.

"Es cierto que no me entran los tiros como desearía, pero tampoco conozco la razón, de ahí que hasta ahora lo que trato de hacer es ayudar al equipo en la construcción del juego, pero soy consciente que para el quinto partido necesito mejorar", declaró Ginóbili.

El gran reto es evitar que los "Big Three" de los Heat, que encabeza el alero LeBron James, el escolta Dwyane Wade y el pívot Chris Bosh, vuelvan a ser una máquina de anotar puntos.

Entre los tres, en el cuarto partido, se combinaron para 85 puntos, algo que los Spurs no se pueden permitir en el quinto si quieren llegar a Miami con la ventaja en la serie.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.