Ministra de Salud: "Una niña embarazada que tiene temor a declarar que la violó un tío, puede llegar al suicidio"

Titular del Minsal dice que el país debe ofrecer a las mujeres la opción de voluntariamente interrumpir su gestación, por causas clínicas y ante abuso. 




Cuenta que se ha preparado con documentos técnicos e informes científicos y que ha estudiado indicadores, estadísticas e incluso testimonios de mujeres del país. Así, con un complejo dossier referido a las variables de la gestación en Chile, la nueva ministra de Salud, Carmen Castillo Taucher, ha dispuesto la presentación que el martes abrirá el debate, en la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, del proyecto de ley que persigue despenalizar la interrupción voluntaria del embarazo en tres causales: riesgo materno, inviabilidad fetal y cuando es producto de una violación.

La epidemióloga, en su primer aterrizaje en la arena política y a menos de dos meses de asumir el cargo, admite que la tramitación será compleja, que habrán ribetes éticos, morales y religosos que se plantearán para contrarrestar la iniciativa. Dice que todas las posturas serán escuchadas y dialogadas, pero que la sociedad está madura para validar la iniciativa, como decisión de un país laico, para las mujeres que decidan  poner término a la gestación.

A semanas de asumir el cargo, usted liderará el debate de un proyecto tan emblemático como controvertido. ¿Cómo califica el desafío?

Llegar fue intenso, porque asumí rápidamente temas complejos que estaban en proceso, algunas situaciones habituales y otras extraordinarias. Pero tengo un bagaje histórico bastante importante que me permite dar respuesta. Es un honor participar en estos temas tan exigidos por la sociedad, tan necesarios de clarificar y de acordar.

¿La sociedad está preparada para abordar y resolver este tema?

La madurez de nuestra ciudadanía nos permite estar discutiéndolo. En su oportunidad existió la alternativa del aborto terapéutico y no estamos hablando de aborto, sino de despenalización de la interrupción del embarazo, para tres causas específicas. No es una obligación y como ministerio estamos propiciando las tres causas como una posibilidad de que la mujer decida.

La tercera causa, que permite interrumpir embarazos producto de violaciones es la que más genera detracción. ¿A qué lo atribuye?

Desde el punto de vista religioso, hay distintas posturas y visiones. Nosotros como país tenemos que dar una mirada para todos. Nadie está obligando al aborto, pero es una decisión de un país laico, esa es la diferencia, hay que legislar para el país y la decisión hay que discutirla entre todos.

¿Por qué debe aprobarse?

El que una niña tenga un embarazo por una violación, es un tema muy sensible, una carga emocional muy grande. Si es violada por su padre, queda marcada de por vida. Son madres de alto riesgo que muchas veces rechazan a este niño. ¿Y cómo continuar una vida teniendo un entorno tan violento para ellas? ¿Cómo recuperar el sentido de lo que significa la vida? Incluso puede llegar al suicidio, están todos los extremos, entonces hay que estar muy atentos. Una niña embarazada que tiene temor a declarar que la violó un tío, puede llegar al suicido.

Se fijan plazos máximos distintos, dependiendo de la edad de la madre, para interrumpir la gestación por causa de violación.¿Por qué?

Para las niñas menores de 14 años, generalmente cuando es producto de una violación, especialmente de un pariente, no se dan cuenta que están embarazadas. Por eso se proponen 18 semanas, porque el retraso en su diagnóstico les impide adelantar un aborto por esta causa.Para  mayores de 14 años (donde se fijan 12 semanas como límite) podría ser antes. En todo caso, estos son los márgenes donde habitualmente uno diagnostica un embarazo.

Para esos casos, detractores al proyectos plantean la adopción como alternativa...

Y nadie lo niega. Ahora, ¿qué es lo que nosotros queremos reforzar? La planificación, que no exista dificultades para el acceso de la píldora del día después, que no lleguen al embarazo. Ojalá que esta niña diga "me violó tal persona, por favor llévame a hacerme el tratamiento inmediato de anticonceptivo", que no es abortivo.

¿Quedaría menos marcada una mujer violada, que se embaraza y luego puede interrumpirlo?

Hay un equipo que la evualaría. En eso va tener apoyo de siquiatras, y matrona, para evaluar sus posibilidades emocionales, su entorno, para poder decirle las alternativas que puede decidir. Nosotros creemos que cada mujer tiene que tener esta posibilidad.

¿Qué tan frecuentemente ocurren violaciones en el país?

No hay datos certeros entre las instituciones que reciben las denuncias, pero por datos de Carabineros y que creemos que están subdiagnosticados, aproximadamente hay dos mil violaciones al año. Hay muchas  no denunciadas, porque son de parientes de una menor o porque la mujer está en situación crítica y  no se atreve porque le teme a la persona que la está violando.

¿De estas violaciones, cuántas pueden terminar en embrazo?

Las estadísticas señalan porcentajes variables. Una chica tiene  alto riesgo de embarazo, porque no hay ningún método de protección, pero uno no puede predecirlo. Muchas veces se sabe en forma secundaria; después del parto la matrona toma conocimiento indirecto de la violación; hijos del propio padre, hijo de un tío, y esas situaciones a veces se saben por cercanía humana entre la madre que está recién con su hijito, y  cuenta la realidad de su historia.

Hay centros que, aludiendo objeción de conciencia institucional, han dicho que no están disponibles para hacer abortos...

Preferimos que esto sea debate en el parlamento. Todos tienen que opinar y es importante esta opinión de las instituciones, específicamente de las que han hablado de una situación institucional para no efectuar la interrupción del embarazo. Ahora está la objeción de conciencia personal, individual. La institucional es una modalidad que hasta ahora está como una propuesta de algunas autoridades, y que tendrán que verla a nivel del parlamento.

Las otras dos causas, cuando hay inviabilidad fetal o riesgo materno ¿tendrán plazo? 

El riesgo de vida de la madre no tiene plazo. La inviabilidad fetal puede que tampoco, pero hay que tener mucho respeto al explicarle a la madre lo que significaría si uno interviene después de las 22 semanas de gestación. No hay que esconder nada frente a esta madre, que tiene que tomar una decisión   informada y sin sesgo. Es importante que uno le diga: esto es, decida usted lo mejor, según sus principios, sus pensamientos religiosos y su entorno. Cualquiera que no quiera interrumpir su embarazo, bienvenida sea. Nosotros la acompañaremos hasta el parto, hasta que tenga el bebe incompatible con la vida y que pueda tenerlo en brazos, como lo han querido muchas mamás.

¿Cuántas madres fallecen producto de la gestación?

Sabemos que las muertes maternas son aproximadamente 50 al año,  por distintas causales. En algunos porque no alcanzaron a tener una terapia y otros eran inevitable. Hay un porcentaje que es por aborto y que tal vez esperaron hasta el ultimo límite y fallecieron.

¿Con el proyecto podrían evitarse? ¿Cuántas?

Es que son por distintas causas, la más común es crisis hipertinsiva o daño crónico. Pero las que murieron por aborto, sí. Podría ser un tercio, aproximado. Pero también será decisión de la madre, que puede decir, estando con un tumor, "quiero llegar al final y tener mi hijo a costa de yo fallecer". Ahora, interrumpirlo, no está autorizado por la ley.

Algunos sectores temen que esto abra la puerta al aborto general

El aborto no está en el ideario del ejecutivo, no se ha discutido jamás en las propuestas de gobierno.

DEUDA POLÍTICA

Junto a esta iniciativa, Castillo debe impulsar mejoras en el sistema público, que ha hecho crisis por el abultamiento de listas de espera y por falta de especialistas. También, liderar la discusión de la reforma a isapres -en el segundo semestre de este año- cuyas bases conoce, pues integró la comisión de expertos que elaboró un informe de propuestas.

Esta semana se conocieron las utilidades de $ 60 mil millones entre las isapres y en pocos días se informará el ajuste a los planes. ¿Qué se debería esperar?

Para las personas que dependen de las isapres esto lo sienten como un daño a su patrimonio, al bolsillo. Esperamos que el reajuste sea similar al de Fonasa, que fue de un 3%

Pero Fonasa no tiene lucro, y las isapres sí.

El lucro está en evidencia con las cifras que se dieron a conocer.

En la comisión usted votó por prohibir el lucro y por crear un seguro único de salud, en lugar de mantener a las isapres. ¿Por qué?

En ese momento yo era académica, no ministra. Hoy, tengo que velar por que esos tres millones de habitantes tengan atención sin sesgo, sin discriminación y que su accesibilidad sea lo más transparente respecto a su aporte del 7%. El proyecto de ley tendrá que determinar sobre el seguro único, pero hay países que están trabajando con ese fondo.

¿Fonasa está en condiciones de recibir a a tres millones de afiliados del sistema privado?

Tenemos que hacer cambios estructurales potentes en los sectores público y privado para acabar con las inequidades en ambos; uno por discriminación y el otro por falta de medios y especialistas. El sector público adolece de muchos problemas, tenemos conciencia de ello.

¿Cuáles son los mayores cambios que requiere la red pública?

Estamos trabajando en infraestructura, especialistas, equipamientos y elementos que tienen que ver con calidad asistencial, para que si uno va al sector público sea tan digno como en el sector privado.

¿Hoy día es digno?

Hay muchos lugares que no, pero otros que conozco que sí. Las filas tempranas, la falta de medicamentos, las horas médicas o no poder acceder a un tratamiento, a un procedimiento.... hay un Chile muy diverso y muy dispar en cuanto a su ejecución en el sector.

¿Qué le diría a la gente que debe atenderse en esos lugares?

Que estamos trabajando, que la sensibilidad del ministerio existe y que  sabemos que si tuvieran dinero, no estarían consultándose con nosotros si no que irían directamente a atenderse en otros sectores, donde ellos pueden pagar y solucionar inmediatamente su precariedad.

Es injusto para quienes no lo tienen...

Conozco perfectamente la sensación de disminución, de rabia de la persona por tener que esperar por una atención y, más encima, por una atención digna y por un buen trato. Son deudas del sistema público que quedan y que se están acumulando, pero estamos trabajando para cambiarlo.También hay algo que estoy proponiendo y que es la política del trato amable. A veces nos olvidamos que estamos entre seres humanos y nos tratamos muy mal. Eso es algo que queremos como un sello para esta gestión.

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