Ministro Ribera visita Europa para conocer modelos en materia de justicia civil
La delegación integrada por ministros de la Corte Suprema y parlamentarios conocerá experiencias de los tribunales de España y del sistema de ejecución en Francia.
Con una nutrida agenda de trabajo, el ministro de Justicia Teodoro Ribera, se encuentra visita oficial a España y Francia, junto a tres ministros de la Corte Suprema y cuatro parlamentarios de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia de la Cámara de Diputados, con el objetivo de conocer las experiencias de dichas naciones en materia de justicia civil, en el marco de la Reforma Procesal Civil.
El proyecto de Nuevo Código Procesal Civil -columna vertebral de la Reforma- se encuentra actualmente en discusión en el Congreso y permitirá iniciar una de las principales transformaciones judiciales de la historia local, mediante una profunda modificación a los procedimientos civiles, que son los que ocupan más del 60 por ciento de las causas en los tribunales de nuestro país.
En ese contexto, el Ministro Ribera -quien viajó junto a los ministros de la Corte Suprema Juan Araya, Patricio Valdés y Héctor Carreño, el Presidente de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, diputado Cristián Monckeberg; además de los diputados Jorge Burgos y Giovanni Calderón; y los profesores redactores del nuevo código, Raúl Tavolari y José Pedro Silva- presenciará audiencias en los Juzgados de Primera Instancia de Madrid, y se reunirá con los jueces de dicha entidad, para observar desde la experiencia cómo funcionan y qué dificultades han enfrentado.
La comitiva conocerá, de los propios magistrados, los criterios de formación y selección de los jueces civiles españoles y se reunirá con destacados profesores, como Francisco Málaga Diéguez, profesor titular de Derecho Procesal de la Universidad Pompeu Fabra, y Jordi Nieva Fenoll, catedrático de Derecho Procesal de la Universidad de Barcelona.
En Francia, podrán observar la experiencia de los "hussieres de justice", figura encargada de las ejecuciones civiles en Francia, que tiene ya más de 100 años de experiencia. Para ello, se reunirán con sus mayores representantes y conocerán de primera fuente cómo funciona el sistema y como se sostiene económicamente.
Actualmente en Chile, la primera instancia de un juicio ordinario demora 821 días en promedio, mientras que con el nuevo sistema, ésta se reduciría a 170 días. Ello, mediante la sustitución del actual procedimiento, esencialmente escrito y desconcentrado, a uno por audiencias, con predominio de oralidad y más dinámico.
De este modo, las personas que tengan un conflicto civil o comercial, ahorrarán tiempo y dinero al momento de enfrentar juicios en materias tan cotidianas como problemas con arriendo, compraventa de bienes, cobro de deudas, cumplimiento de contratos, o indemnización de perjuicios, entre otros.
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