Muestra rescata la influencia de la Bauhaus en el cine y la ciudad

Muchas veces la represión de un conflicto bélico provoca explosiones de libertad en el ámbito artístico. Fue lo que ocurrió en Alemania: tras la Primera Guerra Mundial surgió la Bauhaus, un movimiento radical que planteó la unión del arte, el diseño y la arquitectura con el fin de que incluso el objeto más cotidiano tuviese un valor estético. Su influencia más reconocida fue en la arquitectura, con edificios de líneas racionales, limpias y sencillas de la mano del fundador, Walter Gropius, y su otra figura mayor, Mies van der Rohe. Los seguían en la pintura otro puñado de genios como Wassily Kandinsky, Paul Klee y Lázló Moholy-Nagy. No fue extraño que el influjo de la Bauhaus traspasara las fronteras de sus sedes en Weimar, Dessau y Berlín, sobre todo cuando el sueño se acabó. En 1933, la escuela dejó de funcionar tras los hostigamientos nazis y sus cultores emigraron a países como EE.UU., Canadá e Israel, donde los recibieron con los brazos abiertos.

Claro que tras 80 años, aún hay aspectos que se desconocen, como la relación de la Bauhaus con el cine, que ahora es recogida en una muestra en el Museo de Bellas Artes, gestionada por el Goethe Institut, la Fundación Bauhaus Dessau y el Museo del Disñeo en Berlín. Se trata de 22 filmes inéditos en Chile que muestran la experimentación visual de la escuela alemana. "Walter Gropius planteaba el cine como la 'ciencia de la observación'. Fue la mejor herramienta para trabajar con la sociedad moderna, que era lo que la Bauhaus buscaba", dice el curador alemán Christian Hiller.

Se exhiben tres tipos de filmes, producidos entre los año 20 y 30: los reportajes documentales que muestran la transformación social de Alemania, los que promocionan la Bauhaus y los artísticos que, según Hiller, son los "más bellos por su experimentación con el color, la geometría y el movimiento". Entre ellos hay películas de Viking Eggeling, Moholy-Nagy y Werner Graeff.

La muestra no deja pasar, tampoco, la influencia de la Bauhaus en la arquitectura chilena, como la de Josef Albers y Tibor Weiner, dos miembros de la escuela alemana, quienes vivieron en el país y trabajaron en la U. Católica y la U. de Chile, respectivamente. En este sentido, en la muestra se lanzó la BauhausStgo, una aplicación digital para descargar gratis en celulares smarthphones y iPad, que reúne 30 edificios de la capital que llevan el sello de la escuela alemana, entre ellos, el Edificio Plaza de Armas, de Sergio Larraín García Moreno y otros; la U. Técnica del Estado, de Fernando Castillo Velasco, y el edificio de la Cepal, de Emilio Duhart.