Niña paquistaní baleada por talibanes se pone de pie y se comunica por escrito
El equipo médico de Malala Yousufzai, dijo que la menor de 14 años no podía hablar porque fue sometida a una traqueotomía a fin de que pudiera respirar y tiene un tubo conectado al cuello.
La niña paquistaní de 14 años, Malala Yousufzai, herida por disparos de hombres armados talibanes está todavía está en riesgo vital, pero evoluciona favorablemente y pudo ponerse de pie por primera vez con alguna ayuda, dijeron hoy los médicos que la tratan en un hospital británico.
Malala, quien fue baleada por expresarse públicamente contra los talibanes, fue llevada desde Pakistán a Birmingham para recibir tratamiento luego de ser atacada este mes, en un incidente que desató una amplia condena de la comunidad internacional.
La menor se ha convertido en un poderoso símbolo de la resistencia a los esfuerzos del grupo radical islamista por negarle a las mujeres el derecho a educarse y otros beneficios. Dave Rosser, director médico del Queen Elizabeth Hospital, dijo que ahora la adolescente puede escribir y parece recordar algunos eventos, pese a sus lesiones neurológicas.
"Está claro que todavía no está fuera de riesgo vital", dijo Rosser a los periodistas, y agregó que tuvo una "lesión muy muy grave". Sin embargo, afirmó que evolucionaba "muy, muy bien". "De hecho logró pararse con alguna ayuda por primera vez esta mañana. Se está comunicando libremente, escribiendo", declaró.
Su equipo médico dijo que la adolescente no podía hablar porque fue sometida a una traqueotomía a fin de que pudiera respirar y tiene un tubo conectado al cuello. El procedimiento fue realizado porque sus vías respiratorias se habían hinchado debido a las heridas de bala, indicó Rosser.
Yousufzai recibió disparos en la cabeza y cuello cuando salía de su escuela en Swat, situada al noreste de Islamabad. Los talibanes dijeron que la atacaron porque habló en contra del grupo y elogió al presidente estadounidense, Barack Obama.
Uno de los supuestos autores del ataque fue capturado durante una ofensiva militar en el 2009 contra los talibanes, pero las autoridades paquistaníes lo liberaron tres meses después, señalaron dos altos funcionarios.
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