Onemi triplicará para 2013 su presupuesto respecto al año del terremoto del 27/F

La Oficina Nacional de Emergencias triplicará su presupuesto de cara al próximo año respecto al 2010, cuando ocurrió el terremoto de 8,8° en la escala de Mercalli. El dinero para ese año alcanzó la cifra de $4.013.830.000, mientras que para 2013 el presupuesto contempla $12.150.189.000, que irán enfocados en el fortalecimiento de la red regional de la Onemi.

El director del organismo, Benjamín Chacana, explica a La Tercera que "las emergencias pueden ocurrir en cualquier lado y bajo ese punto de vista todas tienen que estar igual de preparadas como la Metropolitana".

"Aquí no ocurre como en algunas compañías por ejemplo, que la mitad de los presupuestos están en el nivel central y la otra se divide en 15, aquí se distribuye en 15 en términos de recursos humanos, en términos de tecnología, de protocolo. Es así como hay un incremento importante en RR.HH. En 2010 habían promedio dos personas por oficina regional, hoy hay ocho. Y el próximo año esperamos comenzar en enero con 11 personas", agregó Chacana.

Las especialidades donde irán enfocados los aumentos de personal, son "principalmente radioperadores certificados, que son los que ayudan a los monitoreos y a transmitirla información a nivel país. También se sumaron profesionales, expertos y personal administrativos. Además de geógrafos, prevencionistas de riesgo enfocados en trabajar en la alerta temprana".

Otro ítem que se reforzará con el nuevo presupuesto, que este año bordeó los $8.000 millones, "es la capacitación de los directores regionales, quienes desde 2010, todos han ido fuera de Chile a aprender a diferentes agencias: A Japón, Estados Unidos, España, etc...", según el director nacional de la Onemi.

El uso de los dineros de la oficina de emergencias nacional, se cerrará con la continuación de los simulacros de alta complejidad que se han realizado este año. En ese aspecto, los trabajos para 2013 van enfocados a llevar acabo entre octubre y noviembre un simulacro nacional para estar preparados para enfrentar un sismo de las características del de 2010 con tsunami incluido.