PIB de China creció un 7,8% en el tercer trimestre
En el acumulado de los nueve primeros meses del año, el PIB chino ha crecido un 7,7%, por encima del objetivo que se ha fijado el gobierno para todo el 2013 de 7,5.
El Producto Interior Bruto (PIB) de China creció un 7,8 por ciento interanual en el tercer trimestre del año y alcanzó los 38,67 billones de yuanes (6,30 billones de dólares), según las cifras oficiales.
Es el primer repunte en un año del PIB de la segunda economía mundial. En el segundo trimestre, el crecimiento había sido del 7,5 por ciento.
Trimestre a trimestre, la economía china creció un 2,2 por ciento más en los últimos tres meses con respecto al segundo trimestre.
En el acumulado de los nueve primeros meses del año, el PIB chino ha crecido un 7,7 por ciento, por encima del objetivo que se ha fijado el Gobierno para todo el año, del 7,5 por ciento.
Según anunció el Consejo de Estado (Legislativo) en una rueda de prensa, la inversión en activos en los primeros nueve meses del año fue de 30,92 billones de yuanes (5,03 billones de dólares), lo que supone un crecimiento interanual del 20,2 por ciento.
La inversión en activos inmobiliarios fue de 6,11 billones de yuanes (995.114 millones de dólares), un crecimiento interanual del 19,7 por ciento.
Las ventas al por menor en los tres primeros trimestres de 2013 alcanzaron un volumen de 16,88 billones de yuanes (2,75 billones de dólares) y crecieron un 12,9 por ciento interanual.
La producción industrial aumentó un 10,2 por ciento interanual en septiembre, ligeramente por debajo del 10,4 por ciento registrado en agosto.
Estos datos se dan a conocer después de que el lunes, la Agencia Nacional de Estadísticas reveló que en septiembre el índice de precios al consumidor creció un 3,1 por ciento interanual, y el sábado se diera a conocer que las exportaciones chinas cayeron ese mes un 0,3 por ciento.
En un discurso en la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC) la semana pasada, el presidente chino, Xi Jinping, afirmó la semana pasada que un crecimiento del 7 por ciento es suficiente para lograr la meta que se ha fijado de doblar el Producto Interior Bruto (PIB) y los ingresos per cápita para 2020.
No obstante, reconoció que los desafíos que encara la economía de su país -que incluyen una caída en la demanda externa, un exceso de capacidad de producción y el endeudamiento de los gobiernos locales- son "especialmente difíciles".
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