¿Por qué los buenos directores no hacen buenos videojuegos?

Desde hace un tiempo que la industria de los videojuegos se acerca en ganancias a la del cine. De hecho, los títulos lanzados en 2014 tuvieron beneficios por 75 millones de dólares en EE.UU.,cercano a los 90 millones que generó el cine en el mismo año. No sólo se asemejan en ganancias. Grand Theft Auto V costó 265 millones de dólares, cifra muy similar a las  actuales superproducciones de Hollywood.

Los números han hecho que los videojuegos se parezcan cada vez más a las películas, y han seducido a directores como Steven Spielberg y Guillermo del Toro para dirigir un juego. Sin embargo, por distintas razones, muchos de estos proyectos no se han podido llevar a cabo con éxito.

El último director que tuvo un traspié en la industria de los videojuegos fue el mismo del Toro, quien se retiró de la producción del juego Silent Hill. El título era muy esperado por los fanáticos, debido a que en el proyecto también estaba involucrado Hideo Kojima, creador de la saga Metal Gear, juego que se caracteriza por tener largas escenas y guiones muy elaborados, similares a las de un filme.

Silent Hill era financiado por Konami, creador del popular juego de fútbol Pro Evolution Soccer, empresa que no ha tenido muy buenos resultados en los últimos años, lo que habría gatillado la cancelación del proyecto.

No es la primera vez que el director mexicano no logra concretar un proyecto en la industria de los videojuegos. En 2010, se embarcó en la dirección del juego inSANE, pero el estudio THQ cerró y Del Toro no pudo terminar el juego.

Steven Spielberg sí ha logrado dirigir y tomar parte en la producción de un juego. De hecho, participó en el título que es considerado como uno de los peores juegos de la historia, ET(1982), que se basaba en el popular filme del extraterreste

Pero no sólo de malos resultados ha vivido el director, Medal of Honor, juego basado en la Segunda Guerra Mundial, sí tuvo éxito en la industria de los videojuegos. Spielberg también participó de otros experimentos que no lograron ser populares.

El creador de la saga Star Wars, George Lucas,  también incursionó en consolas a través de su propio estudio. LucasArts produjo cerca 50 títulos en 30 años. Sin embargo, Disney -que compró el estudio en 2012- lo terminó cerrando al año siguiente.

Beyond Two Souls y Heavy Rain, son dos juegos de factura similar a una película, en los que se pone un alto énfasis en los guiones y cinemáticas. Este género podría ser el camino de algunos directores interesados en la industria de los videojuegos.

Otra salida para los directores que quieren explorar esta industria sería producir de manera independiente, en donde no tengan que depender de las grandes compañías.