Presidente colombiano y FARC agradecen designación de enviado estadounidense para proceso paz
El anuncio fue hecho en Washington por el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, quien dijo que el presidente Barack Obama había decidido comisionar para esa misión a un enviado de alto nivel como Bernie Aronson.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y la guerrilla de las FARC agradecieron hoy a Estados Unidos la designación del diplomático Bernie Aronson como enviado especial para el proceso de paz que ambas partes celebran desde 2012 en Cuba.
El anuncio de la designación fue hecho en Washington por el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, quien dijo que el presidente Barack Obama había decidido comisionar para esa misión a un enviado de alto nivel como Aronson.
"Celebro este anuncio porque reafirma el compromiso de los Estados Unidos con el proceso de paz, tal como me lo han expresado en repetidas ocasiones el presidente Obama y varios miembros de su gabinete", expresó Santos en un comunicado.
"La persona designada es Bernie Aronson, quien tiene una profunda experiencia en América Latina. Como secretario adjunto de Estado, acompañó las negociaciones de El Salvador, por parte del gobierno de Estados Unidos, con un gran compromiso con la promoción de la democracia y de la paz. Su papel será de apoyo al proceso, lo que no significa su participación directa en la mesa de negociación", agregó el mandatario.
Posteriormente, la delegación de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en La Habana saludó el anuncio y agradeció al gobierno norteamericano "la confianza en las posibilidades que, en medio de los obstáculos, tiene la búsqueda de la paz negociada" en el país.
"Reiteramos la compartida convicción de que si alcanzamos un acuerdo, propósito en el que empeñamos todos nuestros esfuerzos, se va a desatar un enorme potencial para el pueblo colombiano", indicó el texto publicado por las FARC.
Asimismo, la guerrilla destacó la presencia de Aronson en las conversaciones debido "a la presencia e incidencia permanente que Estados Unidos tiene en la vida política, económica y social de Colombia, pudiendo ahora, entonces, coadyuvar al establecimiento de la justicia social, la democracia verdadera y la superación de la desigualdad y la miseria".
El gobierno colombiano y las FARC negocian desde noviembre de 2012 en La Habana un acuerdo de paz, que ya deja compromisos parciales en temas como el desarrollo agrario integral, la participación en política de los guerrilleros que se desmovilicen y la lucha conjunta contra el narcotráfico.
Los negociadores de ambas partes discuten desde el año pasado el tema de las víctimas del conflicto armado, de cinco décadas de duración.
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