Primer ministro de Canadá califica de "horroroso" ataque en Quebec
Stephen Harper, añadió, a través de un comunicado, que "este atroz acto no será tolerado". A su vez, la policía investiga el tiroteo que dejó un muerto, en el recinto donde la nueva premier de Quebec, Pauline Marois, ofrecía un discurso.
El primer ministro de Canadá, Stephen Harper, calificó hoy como "horroroso" el ataque cometido durante el acto de celebración de la victoria del Partido separatista de Quebec en las elecciones legislativas de la provincia y que causó la muerte a una persona y dejó gravemente heridas a otras. Harper añadió, a través de un comunicado, que "este atroz acto no será tolerado".
Los hechos se registraron cuando un enmascarado, ntró por la parte trasera del cine de Montreal justo antes de medianoche hora local con un fusil y un arma corta y disparó contra dos personas. Luego prendió fuego a la parte trasera del edificio, cita Reuters.
La Policía informó que el supuesto autor de los disparos es un hombre de 62 años, natural de la provincia francófona y que tras lo sucedido fue enviado a un hospital. Los efectivos tampoco identificaron al fallecido, de 48 años de edad, pero el periódico "Montreal Gazette" dijo que era un técnico que estaba situado cerca del escenario. Un testigo afirmó al periódico que el sospechoso realizó varios disparos pero que el arma que portaba se encasquilló, lo que evitó una tragedia aun mayor.
El tiroteo eclipsó las noticias sobre la ajustada victoria del PQ sobre los liberales en el poder en las elecciones provinciales del martes, lo que supone que gobernará en minoría y no podrá convocar otro referéndum sobre una secesión de Canada.
Pauline Marois, la primera ministra de Quebec, acababa de decir a sus simpatizantes en la celebración que la provincia será independiente un día cuando los guardaespaldas la retiraron
apresuradamente del escenario. Posteriormente regresó para terminar su discurso. Posteriormente Marois señaló que la sociedad quebequesa "no puede dejar que la violencia dicte" el devenir de las elecciones, según consigna Efe.
El incidente supone una conmoción para Canadá, donde las tasas de asesinatos son relativamente bajas y la violencia política es casi inexistente.
Marois había prometido reforzar las leyes diseñadas para asegurar el dominio de la lengua francesa, lo que ha provocado a algunos miembros de la comunidad minoritaria en lengua inglesa.
La última muerte política en Canadá se produjo en octubre de 1970, cuando un grupo nacionalista radical de Quebec secuestró a un ministro provincial y a un diplomático británico. El primero fue hallado después estrangulado.
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