Primer ministro Noda es reelegido como líder del Partido Democrático de Japón

El primer ministro japonés, Yoshihiko Noda, mantendrá su cargo como jefe de gobierno tras ser reelegido hoy presidente de su partido, en un momento marcado por la presión para que anticipe las elecciones generales y la tensión de las disputas territoriales con Beijing y Seúl.

Noda, que ha centrado su mandato en sanear las cuentas fiscales (Japón es el país industrializado con la mayor deuda pública del mundo), renovó su liderazgo al frente del gobernante Partido Democrático con un amplio apoyo de sus miembros frente a otros tres candidatos.

Tras la votación, se comprometió a impulsar la economía para fortalecer su formación ante unas elecciones generales que se antojan cada vez más cercanas, ya que este verano se comprometió con la oposición a convocar elecciones anticipadas "pronto", aunque sin especificar fecha.

A cambio, obtuvo el apoyo parlamentario necesario para aprobar una ley de reforma fiscal que incluía una polémica alza del IVA que ha desgastado su popularidad.

"Estamos en una situación dura tanto a nivel doméstico como en el exterior, y siento una gran responsabilidad ya que debo tomar las decisiones que sean convenientes", admitió Noda tras conocer su victoria.

RELACION CON SUS VECINOS
La reelección del actual jefe de gobierno, que de haber sido derrotado habría sido sustituido en el poder por el nuevo líder del partido, contribuye a refrendar cierta imagen de estabilidad en Tokio, envuelta ahora en una escalada de rifirrafes diplomáticos con sus vecinos.

Especialmente áspero es el desencuentro con Beijing tras la compra por parte del gobierno nipón de terrenos de las disputadas islas Senkaku (conocidas como Diaoyu en chino) de manos de su dueño japonés, una decisión que provocó violentas y multitudinarias protestas antiniponas en China entre el 15 y el 18 de este mes.

En ese sentido, algunos analistas apuntan a que la adquisición de los islotes llevada a cabo hace unos días por el gabinete de Noda contribuye a ofrecer una imagen de liderazgo firme frente a la pujanza China, y resulta de lo más oportuna en un momento en que la popularidad del Ejecutivo está bajo mínimos en las encuestas.

En lo referente a la disputa con Seúl por las islas Takeshima (Dokdo en Corea del Sur), el líder nipón no ha vacilado tampoco a la hora de condenar la reciente visita al archipiélago del presidente surcoreano, Lee Myung-bak, y de apoyar la idea de llevar el asunto ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).

Hoy, Noda obtuvo 818 puntos de los 1.231 que había en juego para elegir al presidente de su formación, una victoria esperada y apabullante que certifica su firme autoridad sobre las bases del PD.

Todo apunta, según fuentes del gobierno, a que el primer ministro anunciará la semana próxima una nueva ronda cambios en su gabinete, en lo que sería ya el tercer lavado de cara en poco más de un año para tratar de mejorar su popularidad entre el electorado.

En su poco más de un año en el poder Noda no ha logrado consolidar la alta tasa de popularidad con la que llegó al gobierno, algo que también sucedió a sus últimos predecesores, tanto del PD como del hoy opositor Partido Liberal Demócrata, lo que ha hecho que Japón haya visto desfilar seis primeros ministros desde 2007.

Los medios locales señalan que es poco probable que Noda pueda arañar mucho más tiempo en el poder y menos aún completar la legislatura, que concluye en verano de 2013, ya que tras la deserción en julio de una cincuentena de legisladores el PD mantiene un dominio parlamentario demasiado precario.

Actualmente, bastaría con que 6 o 7 escaños del PD lo abandonaran para dejar expuesto al bloque a una moción de censura, lo que prácticamente forzaría la disolución de la cámara baja y el adelanto de elecciones.