Ricardo Urzúa: "Intento ser muy ordenado con mis ingresos"

Días difíciles vive Ricardo Urzúa (940º). Su nombre ha salido a la luz pública luego de que una agencia polaca alertara de flujos sospechosos de apuestas en un partido suyo, en uno de Juan Carlos Sáez y en otro que no ha sido revelado. El Choro, como es conocido desde pequeño porque cuando jugaba a la pelota prendía con facilidad y en más de alguna pelea participó, no lo pasa bien.

"Estoy afectado emocionalmente, estoy triste por las fechas, por mi familia, porque para mí esto es gravísimo. Pero a la vez estoy tranquilo porque sé lo profesional que soy y sé que todo va a estar bien", dice.

En ese contexto, se siente perjudicado por las filtraciones. "Estamos molestos por la facilidad con que ese mail salió de la federación y lo grande que se ha hecho todo esto por un supuesto correo, que aún no hemos visto. El daño de imagen que queda después de esto es terrible...", plantea.

Con una promisoria carrera en juniors, donde llegó a ser top ten, el rancagüino enfrentó a jugadores que hoy están en la élite del tenis, como Milos Raonic y Grigor Dimitrov. Sin embargo, las cosas no funcionaron después. "Es muy difícil, se generaron muchas expectativas de parte del tenis, de la gente que me manejaba y de mí mismo, que no fui capaz de manejar sobre todo al inicio, ya que los resultados no llegaban. Y hasta el día de hoy es difícil ver a jugadores con los que compartí de junior, que a muchos les gané, estén top 100", lamenta.

Las puertas comenzaron a cerrarse y el Choro tuvo que empezar de cero. "La gente te deja solo, todos los que estaban contigo se van y quedan siempre la familia y unos pocos, que me quieren y están conmigo en las buenas y malas".

Sin recursos, la ruta de los interclubes europeos aparecía como el camino más factible para generar. "Intento ser muy ordenado con mis ingresos y juego Interclubes, que con eso logro mantenerme todos los años. Juego en Alemania, Francia y República Checa, lo que me quita mucho tiempo para jugar torneos ATP. Eso lo llevo haciendo durante cinco años, desde que me quedé sin auspiciadores. Gano 18 mil euros ($ 12.670.000) y con eso me mantengo en el año. De eso vivo, porque en los Futuros no se puede ganar mucho", apunta.

De hecho, esta temporada sus ingresos en singles fueron apenas de US$ 2.970 ($ 1.998.000), mientras que en dobles alcanzó US$ 2.877 (US$ 1.936.000), en torneos en lugares como Serbia, Marruecos, Bolivia y Rusia.

En tanto, durante la última semana hubo varios cuestionamientos de parte de jugadores chilenos y argentinos al partido que disputó ante el transandino Franco Egea, que perdió por 4-6, 6-0 y 7-6 (4), en el Futuro Chile 8. "Fue 6-4 para mí y cuando íbamos 4-2 en el primer set, me caí y me doble la rodilla donde hace un año tuve un corte de ligamentos. Me pusieron de todo y terminé jugando con la rodilla casi inmovilizada... ¿Por qué la gente no te cuenta que me caí muy fuerte? Todos vieron eso y todos vieron cómo terminé jugando el tercer set en una pierna, literalmente...".

Este año, Urzúa ha debido lidiar con las lesiones, tal como ocurrió en 2015, cuando sobrevivió a un accidente automovilístico. "Fue un milagro, me chocó un taxista irresponsable que venía a 145 por Vicuña Mackenna. Salí eyectado y desperté a 20 metros del auto... ¡Fue terrible!", recuerda.

Eso impidió repetir o superar lo hecho en 2014, su mejor temporada, en la que alcanzó su puesto más alto en singles (403º) y dobles (275º). Ahora busca seguir adelante, aunque dice estar preocupado pues los cuestionamientos ya llegaron a los clubes que le dan trabajo en Europa: "La noticia llegó hasta Alemania y me perjudica muchísimo".