Thomas Muller no quiere jugar más contra San Marino: "No tiene nada que ver con el fútbol profesional"

San Marino es sinónimo de un triunfo fácil para los rivales. Nunca ha ganado un partido oficial y sus seleccionados deben tener otros trabajos además del fútbol. Pero no a todos les gusta tener esos tres puntos en el bolsillo. Un ejemplo es Thomas Muller, que junto a la selección alemana enfrentó la semana pasada a San Marino, imponiéndose por 0-8.

"Jugar contra San Marino no tiene nada que ver con el fútbol profesional. No entiendo el sentido que tiene jugar partidos así", expresó.

El jugador agregó que "entiendo que para ellos, jugar contra los campeones del mundo es un plus, pero también los futbolistas tenemos que defender nuestro trabajo, y estos partidos son un riesgo innecesario".

Respuesta inmediata

Las palabras del delantero no pasaron inadvertidas en San Marino. Alan Gasperoni, jefe de prensa del Comité Olímpico de ese país, le dedicó al alemán una publicación en su cuenta de Facebook, en la que además de criticar las palabras de Muller, enumeró diez razones para justificar el partido entre ambas naciones.

"Querido Thomas Müller, tienes razón. Los partidos como el del viernes no sirven para nada. A ti no te sirve venir hasta San Marino casi gratis en un fin de semana en el que podrías quedarte con tu mujer en el sofá de tu casa de lujo. O, quien sabe, podrías haber participado en algún evento organizado por patrocinadores ganando miles de euros", expresó Gasperoni. Luego elaboró el siguiente listado:

"1.- Sirvió para demostrarte que ni siquiera contra equipos malos como el nuestro consigues anotar. No digas que no te enfadaste cuando Simoncini impidió que marcaras.

2.- Sirvió para hacer entender a tus dirigentes que el fútbol no es de su propiedad. Es de todos los que lo aman, entre los cuales, quieras o no, estamos nosotros.

3.- Sirvió para recordar a cientos de periodistas de toda Europa que aún existen chicos que siguen sus sueños y no sus directrices.

4.- Sirvió para confirmar que los alemanes no cambiarán nunca y que la historia todavía no les enseñó que la prepotencia no siempre es garantía de victoria.

5.- Sirvió para enseñar a 200 chicos de San Marino que siguieron el partido por qué sus entrenadores les piden siempre el máximo esfuerzo. Quién sabe si un día su sacrificio se vea recompensado con un partido contra los campeones del mundo.

6.- Sirvió para que tu Federación (y también la nuestra) ingresaran el dinero de los derechos de televisión. Con eso, además de pagarte las molestias, se pueden construir instalaciones para niños en tu país, escuelas de fútbol y estadios más seguros. Nuestra Federación, y ahora te desvelo un secreto, construirá un nuevo campo de fútbol en un pueblito perdido llamado Acquaviva. Tú podrías construirlo con seis meses de tu sueldo, pero nosotros lo haremos con los derechos de los 90 minutos de partido.

7.- Sirvió para que un país del porte de un sector de tu estadio en Múnich saliera en los periódicos por un buen motivo. Un partido de fútbol siempre es un buen motivo.

8.- Sirvió para que tu amigo Gnabry debutara en la selección con tres goles. Ahora puede pedir al Werder Bremen una renovación de contrato por el doble de lo que gana ahora.

9.- Sirvió para que algún sanmarinense triste recuerde que tenemos una selección verdadera. Les ocurrirá también a ustedes, que son casi perfectos, que alguno venga cuando pierden y comience a romper las pelotas, ¿no?

10.- Sirvió para enseñarme que aunque vistan el modelo más bonito de camisetas de Adidas, por debajo serán siempre esos que se ponen calcetines blancos con las sandalias".