Tottenham amenaza a Bale con dejarlo un año en la banca por querer salir del equipo
La inminente partida del jugador galés provocó el descontento del club inglés, que quiere retenerlo por una temporada más.
El fichaje de Gareth Bale pasa por un momento clave. El mediocampista presionó al presidente del Tottenham, Daniel Levy, para que cumpliera su palabra de dejarlo salir del equipo sin problemas.
La promesa entre Bale y Levy consistía en que si el cuadro inglés no se clasificaba a la Champions League y él recibía una oferta importante, lo escucharía y lo dejarle partir. Sin embargo, los deseos del galés por querer continuar su carrera deportiva en otro club lo hizo no viajar a Mónaco para disputar el último partido amistoso que ha tenido el conjunto inglés, esta vez contra el equipo del Principado.
Bale acusa que se resintió de dolores musculares en el glúteo y le dijo a su entrenador André Villas-Boas que no estaba en condiciones de ser nominado para el encuentro. Por eso, el técnico sabe que Gareth no quiere formar parte de su plantilla y que sólo piensa en vestir la camiseta del Real Madrid. Incluso, este viernes sus compañeros del Tottemham se despidieron de él y algunos hasta le pidieron que les firmara las camisetas.
Pero Bale no sólo se negó a jugar en la gira asiática, también lo hizo este sábado en Mónaco y ha estado entrenando solo en la Ciudad Deportiva de Enfield.
La rebeldía del galés lo ha hecho pensar en hacer público su enfado si el Tottenham sigue con su postura de no ceder en esta negociación.
Si esto ocurre, el jugador se plantearía hacer unas declaraciones en las que detallará los motivos que le han llevado a no jugar los últimos partidos de la pretemporada del Tottemham. Además, explicará su cambio de actitud, que también lo ha enemistado con la hinchada.
Toda esta teleserie ha hecho al club inglés amenazarlo con cerrarle las puertas definitivamente, diciéndole que se quedará en el equipo la próxima temporada y en el banco de suplentes.
El presidente del Tottenham está muy enfadado con Bale y, si cede, será muy difícil. Levy ya protagonizó un desacuerdo con Berbatov, que terminó migrando al Manchester United. Y el año pasado, Modric también se resignó a ser suplente.
Bale no está de acuerdo. Quiere salir ya e insiste en que el presidente del club cumpla su palabra.
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