Pasada las 13.00 de este lunes llegaron hasta el Palacio de La Moneda, el canciller Alberto van Klaveren y el embajador de Chile en Argentina, José Antonio Viera-Gallo. Inmediatamente, y sin dar declaraciones, se dirigieron al segundo piso para reunirse con el Presidente Gabriel Boric.

A las 15.49 horas, el Mandatario publicó en su cuenta de X que el objetivo del encuentro era “pasar revista a nuestras relaciones con nuestro vecino país en sus múltiples dimensiones. Lo dije y lo reitero, las relaciones internacionales de Chile son una política de Estado, más allá de las afinidades de los gobernantes de turno”.

La cita entre las autoridades se dio entre los días de extrema convulsión en las relaciones entre Chile y Argentina. Eso sí, aclararon, que no se trató de un llamado a consulta, solo fue una cita aprovechando que Viera-Gallo se encuentra de vacaciones en el país.

En el encuentro, en todo caso, no estuvo el asesor de asuntos internacionales de Boric, Carlos Figueroa, quien suele coordinar y participar de las giras al extranjero del Jefe de Estado e incluso de bilaterales con otros presidentes.

La cita se originó a raíz de los dichos del ministro de Economía argentino, Luis Caputo, quien la semana pasada aseguró que “hoy (a los chilenos) los gobierna prácticamente un comunista que los está por hundir”, en referencia al Presidente Boric. Al día siguiente, a través de X, el Mandatario trasandino, Javier Milei, respaldó a su secretario de Estado y comentó: “Poniendo zurdos en su lugar”.

En ese contexto, tras la reunión, el canciller sostuvo que “el Presidente (Boric) nos ha pedido justamente seguir comprometidos con la normalidad en la relación con Argentina y superar estos episodios y estas diferencias que se han producido”.

De esa manera, en el Ejecutivo, en voz del canciller Alberto van Klaveren, Boric buscó dar por cerrado el episodio de tensiones que durante los últimos días han protagonizado Chile y el país trasandino.

Aunque el ministro de Relaciones Exteriores confirmó que no ha habido contacto directo entre el líder chileno y Milei, sí ratificó que ambas cancillerías y embajadas siguen trabajando en conjunto.

Pero esta polémica por declaraciones cruzadas no quedó solo ahí. Este viernes, a eso de las 17:50 horas, una aeronave chilena violó el espacio aéreo argentino a la altura de la Región de Aysén. Al día siguiente, el gobierno trasandino pidió explicaciones.

Al respecto, Van Klaveren informó que recibieron una nota de reclamo que fue respondida por el encargado de negocios de la Embajada de Chile en Argentina. Respecto al contenido, reconoció que “se cometió un error”.

Y agregó: “Y así como se produjo este error, también por la parte argentina se produjo un error cuando efectivamente se construyeron unos paneles en territorio chileno. Lo importante es reconocer estos errores y evitar que se produzcan en el futuro”.

Con todo, el embajador Viera-Gallo aclaró que “puede haber entredichos que se producen, entre otras cosas, por diferencias políticas que puede haber entre dos gobiernos, pero evidentemente la voluntad del gobierno de Chile, como lo ha expresado el canciller y el Presidente, es que las relaciones bilaterales sean y se mantengan lo mejor posible”.

Así, el Ejecutivo, por orden de Boric, intenta dar por cerrada la serie de polémicas que una vez más protagonizan ambos países.

Tal ha sido la magnitud de lo ocurrido con Argentina, que este lunes fue uno de los temas centrales del comité político ampliado, en el que de parte del gobierno participó el ministro de la Secretaría General de la Presidencia, Álvaro Elizalde; la ministra de la Mujer, Antonia Orellana; y la ministra subrogante de la Secretaría General de Gobierno, Aisén Etcheverry.

Al unísono, los dirigentes de los partidos que asistieron al encuentro valoraron que el Presidente Boric haya evitado escalar el asunto y coincidieron en que su respuesta fue lo mejor que pudo hacer frente a los ataques.

La semana pasada, tras los posteos de las autoridades argentinas, Boric afirmó que “hay que tener un poquito más de humildad porque nosotros, los presidentes, pasamos. Pero las instituciones y los pueblos quedan”.

Los timoneles también aprovecharon de respaldar el trabajo de Van Klaveren a cargo de las Relaciones Exteriores.

“Valoramos altamente la posición de Gabriel Boric, como Presidente de Chile, frente a esta suerte de provocación -lo digo yo eso- que han cometido voceros del gobierno de Argentina y que ha respaldado el propio presidente Milei”, señaló el timonel del Partido Comunista Lautaro Carmona.

El dirigente apoyó la respuesta que entregó Boric al asegurar que lo permanente es la relación entre estados y pueblos. Pero no solo eso, también destacó la postura que sobre este caso manifestó la Unión Demócrata Independiente (UDI).

“Valoramos también el hecho de que la UDI, como partido de oposición, se haya manifestado claramente frente a que en los temas de política interna no puede una representación de un gobierno distinto de afuera intervenir. Y creemos que esa deberá ser la forma que a nivel general todos asumieron”, subrayó Carmona.

Aunque no fue el tema central, la reforma al sistema político también fue parte de lo que conversaron los representantes de la alianza de gobierno con el Ejecutivo.

La principal controversia está en que, a juicio de algunos dirigentes, el proyecto que actualmente se tramita en el Senado pondría en riesgo un acuerdo unitario de cara a las elecciones parlamentarias y presidenciales del próximo año.

Esto fue planteado durante la reunión en La Moneda. Y ante las voces que aseguran que ha existido una pasividad del Ejecutivo en esta materia, pues la propuesta que se está discutiendo no es la que comprometió el Presidente Boric, otros lo descartan.

“El ministro Elizalde está activamente trabajando en silencio”, aseguró el diputado de la Federación Regionalista Verde Social (FRVS), Jaime Mulet.

Aunque se incorporó más tarde a la cita, Mulet afirmó que sobre este tema “hice presente que se debe avanzar muy rápidamente. Queremos lista unitaria, pero las cosas van relacionadas, porque va a depender si se aprueba así como viene el proyecto de los senadores, o se rectifica. O sea, hay fórmulas que promueven más la unidad que otras”.

Mientras que para el diputado y presidente de Acción Humanista, Tomás Hirsch, “ese proyecto lo que hace es debilitar la democracia, nos hace recordar un poco lo que fue el binominal. Es un proyecto que nosotros desde Acción Humanista claramente vamos a rechazar”.

Y agregó: “Yo espero que el gobierno dé una señal clara de buscar un acuerdo que permita fortalecer la democracia, la coalición de gobierno y a los partidos políticos”.