Directivas de Chile Vamos intentan contener recriminaciones tras fracaso en el plebiscito

Una especie de “pacto de no agresión” es el que se promovió a nivel de directivas de Chile Vamos y el Partido Republicano, luego de que la derecha fuera derrotada en el plebiscito de este domingo en el que la opción del “A favor” fue vencida. Sin embargo, esto no evitó que rápidamente en la oposición comenzaran las recriminaciones internas con el objetivo de buscar responsabilidades en el fracaso.

Si el domingo ya hubo dirigentes de Chile Vamos que criticaron a republicanos -como el senador Francisco Chahuán (RN)-, este lunes aumentó el fuego cruzado, esta vez desde el Partido Republicano criticando también a Chile Vamos.

El primero en lanzar los dardos fue el exconsejero republicano Luis Silva, quien criticó el despliegue que tuvo la alcaldesa y liderazgo presidencial de la UDI, Evelyn Matthei, por el “A favor”. El abogado afirmó a El Mercurio que la jefa comunal “entró tarde al partido. Se demoró”. Su frase despertó molestia en Chile Vamos, donde el excandidato presidencial de Evópoli, Ignacio Briones, lo trató de “cara de palo”.

El diputado republicano Luis Sánchez también escribió en la red social X (antes Twitter): “Una de las lecciones importantes del resultado de anoche es que las campañas no se ganan si es solo un partido el que está en la calle. Más que andar en la prensa haciendo diagnósticos, sería bueno que empiecen a trabajar”. Mientras que durante la jornada el excandidato presidencial de Chile Vamos, Sebastián Sichel, enfatizó que la derrota tiene un nombre: el de José Antonio Kast.

Mientras que la expresidenta del Consejo Constitucional, Beatriz Hevia (Partido Republicano), sostuvo que “por supuesto que uno podría haber esperado que algunos actores políticos se sumaran de manera previa o antes del plazo que lo hicieron (...). Yo no estoy en una línea de buscar responsables, creo que sería un error”. En Chile Vamos también el senador Iván Moreira (UDI) arremetió contra el rol de Kast. A su partido le endosan no haber liderado un texto en común y haber tenido “gustitos” respecto de algunas normas que apuntaban principalmente a su nicho.

Sobre esto último, el diputado Jorge Guzmán (Evópoli) recalcó que “las responsabilidades recaen en el Partido Republicano, se dieron ciertos gustos que le costaron caro a Chile”.

El fuego cruzado complicó las pretensiones de los partidos, pues la idea de las directivas es mantener la calma con el fin de apostar a próximos desafíos electorales como las municipales de 2024. En esos comicios, Chile Vamos quiere hacer pactos por omisiones con el Partido Republicano para recuperar comunas emblemáticas de manos de la izquierda como Santiago, Maipú, Ñuñoa, Valparaíso y Viña del Mar.

Por lo mismo, la idea es que el tono confrontacional entre algunos dirigentes no afecte una posible negociación, la que estiman debería comenzar pronto. En ese sentido, en la derecha consideran que, pese a la derrota, la campaña demostró que se puede trabajar en conjunto en unidad, y eso es algo de lo que quieren replicar nuevamente.

Pese a ello, el tono confrontacional movió las aguas en la derecha. Por lo mismo, en las directivas de los partidos quieren seguir intentando contener a los dirigentes que se han salido de la línea. “Me parece raro y mal que gente de de Chile Vamos le esté recriminando a Kast”, dijo el diputado Miguel Mellado (RN).

En ese sentido, durante la jornada cada colectividad sostuvo sus instancias internas para abordar el escenario posterior a la elección y la relación con la coalición. Por ejemplo, algunas tiendas sostuvieron sus reuniones de directiva, mientras que RN al cierre de esta edición desarrollaba su comisión política.

De todas maneras, algunos dirigentes de Chile Vamos consideran que es oportuno endurecer el tono contra los republicanos, especialmente porque la coalición compite por el mismo electorado que la tienda de José Antonio Kast.

Adicionalmente, la misma tensión en la derecha creció entre los representantes de ese sector que estuvieron por el “En contra”. Durante esta jornada, el senador exrepublicano Rojo Edwards criticó a Kast. “Reconoció su fracaso al que arrastró a todo nuestro sector. Debe reflexionar sobre un liderazgo que destruyó el 62% (del pasado plebiscito de salida) y lo transformó en 44%”, dijo Edwards.

Algunos creen que ese sector que estuvo por el “En contra” comenzará a tomar más forma para arremeter contra la derecha tradicional, mientras que otros ven con atención también los acercamientos de Evópoli con Amarillos y Demócratas, que se dan a distancia de la UDI y RN.