La trastienda del inédito mensaje presidencial nocturno: Goteras, ensayo frustrado, cambio de maleta, un mimo y un Batman

La cuenta pública del Presidente Sebastián Piñera la noche de este sábado, más allá de lo inédito de su horario nocturno, dejó una serie de episodios que estaban fuera de protocolo, fueron inesperados o simplemente la gente no notó.

En la previa del mensaje y mientras llegaban los primeros invitados una gotera fue detectada en el salón de honor del Congreso Nacional. Con un improvisado papel escrito a mano se alertó de la situación a los asistentes. "No sentarse hay gotera", fue la fórmula para que nadie ocupara el lugar.

Según se explicaron desde el Ejecutivo y el Senado, el Presidente Sebastián Piñera intentó realizar un ensayo previo a la cuenta pública de este sábado en el propio Congreso Nacional. La intención del Mandatario era poder realizar un ensayo general el viernes, sin embargo, no le fue permitido.

Como ya es costumbre en las cuentas públicas, los parlamentarios de distintos sectores realizan "publicidad" a sus distintas demandas a través de chapitas que ocupan en sus ropas. Por ejemplo, este sábado se pudieron apreciar algunas como las que repartió el senador Francisco Chahuán (RN) donde se leía "#tren rápido ahora". Desde el Frente Amplio diputados como Pablo Vidal usó una con la lectura "No + AFP". También hubo carteles como el de la vicepresidenta de la Cámara de Diputados Loreto Carvajal (PPD) quien se paseó con uno que señalaba "municipales, regionales #Leydecuota Ahora". Mientras las diputadas comunistas Karol Cariola y Camila Vallejo, levantaron unas camisetas negras pidiendo "#LeyGabriela".

El diputado del Partido Humanista, Raúl Florcita Alarcón, ha sido cuestionado en varias oportunidades por el vestuario con el que asiste a las sesiones de la Cámara. En el último tiempo ha optado por un traje más bien "tradicional", con un infaltable corbatín. No obstante, durante la cuenta pública su atuendo no dejó a nadie indiferente: llegó al Congreso con una máscara de Batman, aunque algunos sostenían que era de Gatúbela. El corbatín lo mantuvo, uno de color rosado.

Otro que llamó la atención en el salón de honor fue el denominado mimo Tuga, quien portó una foto de Camilo Catrillanca en su pecho.

Como es tradición el Presidente de la República previo a su cuenta pública se saca una foto con todos sus ministros en el palacio de Cerro Castillo. Sin embargo esta vez hubo un ausente. Mientras se realizaba la sesión de fotos, el ministro de Economía José Ramón Valente estaba en otra sesión: en una de la Comisión de Economía del Senado donde se discutía y votaba la corrección al proyecto de pago a 30 días.

Un tenso momento se vivió en la previa del mensaje presidencial cuando el diputado Sebastián Torrealba (RN), uno de los encargados de la recepción de los invitados por parte de la Cámara Baja, increpó al embajador de Venezuela, Arévalo Méndez.

"Este Congreso no acepta representantes de la dictadura y las violaciones de los DDHH en Venezuela. Se lo digo en nombre de los más de 300 mil venezolanos que viven hoy en Chile", habrían sido las palabras que lanzó el diputado, según su equipo.

Luego de la serie de polémicas que se generaron por la participación de los hijos de Sebastián Piñera –Cristóbal y Sebastián- a la gira que realizó el mandatario a China y Corea del Sur, en la cuenta pública ninguno de los dos estuvieron entre los invitados del jefe de Estado.

Mientras Sebastián se encontraba fuera de Chile, sí se esperaba la presencia de Cristóbal. No obstante, el jefe de Estado estuvo acompañado por sus hijas y su esposa Cecilia Morel.

La diputada Andrea Parra (PPD) vivió una verdadera odisea durante la jornada de la cuenta pública. Viajó el mismo sábado en avión desde su distrito en la región de La Araucanía y después tomó un bus a Valparaíso. Ahí vino el principal problema, alguien tomó su maleta y dejó una de su mismo color.

La parlamentaria se vio bastante urgida por la situación pues ahí llevaba la ropa que usaría en la cuenta pública, donde además era una de las encargadas de recibir al Presidente. Según explicaron sus cercanos, "tuvo que vestirse con lo que pudo".

El Presidente Sebastián Piñera está acostumbrado a improvisar en sus discursos y este sábado no fue la excepción. Mientras hablaba de las pensiones el jefe de Estado se dirigió a su esposa y lanzó un "Cecilia, yo sé que soy de la tercera edad", causando la risa en la mayoría de los asistentes al salón de honor.

Recién a las 21.28 horas llegó el presidente del Tribunal Constitucional, Iván Aróstica, al salón de honor del Senado, cerca de 50 minutos después de iniciada la ceremonia. Otro de los atrasados fue el diputado de Evópoli, Luciano Cruz Coke quien se unió al Congreso Pleno a las 20:45 horas. Y el senador RN Manuel José Ossandón salió a tomarse un café en medio del discurso.

A las 20:30 horas, al igual como ocurrió en la cuenta pública del año pasado, el Presidente Sebastián Piñera tuvo problemas con el sistema de teleprompter con el que lee su discurso. "Que avance" pidió el Mandatario provocando risas y aplausos de algunos de los asistentes que recordaron la misma frase de 2018.

Por este problema el jefe de Estado no pudo entregar sus anuncios en materia de educación y señaló que el mensaje completo estaba subido en los sitios web oficiales.

Mientras el Presidente Piñera daba cuenta de los cambios que pretende introducir en el funcionamiento del Congreso, el jefe de Estado anunció la reducción a 120 el número de diputados, ahí los parlamentarios oficialistas se pusieron de pie y empezaron a gritar ¡Sí se puede! Luego cuando continuó y anunció la reducción a 40 senadores,, y poner límites a la reelección de senadores, diputados y alcaldes, en sus mismos territorio, los parlamentarios de oposición también se pusieron de pié y comenzaron a aplaudir, provocando la risa de varios de ellos.