Las observaciones de la contralora (s) al proyecto que crea el Servicio de Auditoría Interna de Gobierno

Este martes, la contralora subrogante, Dorothy Pérez, asistió a la comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados para presentar las observaciones de la Contraloría al proyecto de ley que crea el Servicio de Auditoría Interna de Gobierno que es impulsado por el Ejecutivo.

Esta iniciativa se enfoca en asegurar que el Presidente de la República disponga de la información necesaria y objetiva respecto de cómo se están llevando a cabo las políticas y lineamientos gubernamentales, como también del nivel de cumplimiento de los objetivos de eficiencia, eficacia propios de la gestión.

El objetivo es servir de apoyo en la mejora de las operaciones y procesos en la administración del Estado, colaborar al cumplimiento de sus metas, como también evaluar y mejorar la gestión de riesgos y el control interno.

Ante los parlamentarios, la contralora (s) planteó que desde la Contraloría consideran muy positivo darle un rango legal al Servicio de Auditoría Interna: “Es positivo crear esta institución, sobre todo considerando que las líneas de control para poder asegurarnos de establecer mecanismos para controlar, evitar, frenar las irregularidades o incluso los errores, porque no siempre son irregularidades que se producen de manera dolosa, a veces son errores, a veces se producen situaciones por desconocimiento, por falta de capacitación del personal, porque hay alta rotación del mismo”.

Sin embargo, Pérez detalló algunas observaciones que hicieron al proyecto, entre ellos, la necesidad “indispensable” de definir la interacción entre la Contraloría General y el Servicio de auditoría Interna de Gobierno, y especialmente sobre la tuición técnica del órgano contralor sobre las oficinas de control de auditoría y otras instancias que realicen estas tareas.

En ese sentido, apuntó que sobre el servicio es necesario “aclarar cuáles son sus atribuciones, cuál es la tramitación que debe realizar”, aunque relevó que “transformarlo en este servicio de auditoría de gobierno es una cosa que en términos generales parece muy positiva en la línea de fortalecer los controles en el Estado, en el aparato público”.

La contralora (s) destacó que “es importante hacer una diferenciación entre lo que es auditoría interna y lo que es control interno. Las actividades de control interno realizan la revisión in situ, en el día a día, en los procedimientos y en los procesos, en las transferencias de recursos, en todas las actividades de la administración. En cambio, la auditoría interna lo que hace es ir a verificar si esos controles están operando y mira desde una distancia mayor. No es exactamente lo mismo. De hecho, técnicamente es distinto”.

En esa línea, señaló sobre la iniciativa que “cuando vemos que, además de establecer la política de auditoría, además de dirigir y dar directrices en materia de auditoría, también puede disponer auditorías propiamente tales y realizar estos controles, ahí se podría producir entonces una confusión técnica, y es importante aclararlo”.

También sostuvo que se podrían “desviar esfuerzos de auditoría hacia propósitos distintos, incluso podría producirse un bloqueo. Es algo que hay que revisar con cuidado y considerando también los elementos de riesgo y controles que se tienen que aplicar. En el fondo también podría suceder que los equipos que tienen que atender a la ciudadanía en algún momento se vean paralizados de poder seguir realizando sus labores porque tienen que atender al mismo tiempo a estos dos órganos”.

Otra observación dice relación con el trabajo del servicio con la Contraloría: “El problema es que no se precisa en este proyecto de ley cuándo corresponde hacer esta coordinación y tampoco se reconoce, como lo hemos señalado antes, la tuición técnica de la Contraloría sobre esta labor. Entonces, esta coordinación cuando corresponda quedará sujeto a la decisión de qué órgano”.