Lorenzini explica su frase "no me importa la ciudadanía" y asegura que en la reforma tributaria hay que pensar "en los ciudadanos"

El parlamentario además se refirió sobre su voto a favor de legislar, indicando que nunca hubo un acuerdo con la oposición. "El partido no me dice a qué hora voy al baño o tomo desayuno (...) consideraré lo que diga mi partido, pero la decisión es mía". 


Durante esta mañana en una entrevista a Radio Futuro, el diputado e integrante de la Comisión de Hacienda Pablo Lorenzini (DC), explicó su polémica frase "no me importa la ciudadanía", que dijo tras la votación sobre si se debía legislar la Reforma Tributaria del gobierno.

Al respecto, el parlamentario indicó que sus palabras  "está dirigida, no está toda la frase", pues su idea apuntaba a que legislar o no legislar "no significa nada", pues es simplemente decidir "si camino o no camino", "y esa decisión es política", indicó. "Ahora sí vamos a comenzar a ver lo que queremos y lo que no queremos (...) Tenemos que dejar de lado si somos de aquí, si somos de allá. Todos podemos aportar".

Asimismo, el diputado también agregó a modo de broma que esta no era la primera vez que se equivocada.

"En otros años también metí las patas, pero mas que nada son algunos que se aprovechan de las circunstancias. Fueron mal dichas las palabras en el contexto", agregó.

La frase en aquella ocasión fue "Me iba a inclinar por abstenerme y mantenerme al medio en esta cuestión, pero ya que está aprobada la idea de legislar, cuando veamos artículo por artículo ahí espero que la oposición trabaje conjunta, porque ahí es la verdad y ahora es política, me da lo mismo la ciudadanía, ahí podemos votar a favor o en contra".

Sobre la importancia que ha cobrado la discusión de esta reforma, el parlamentario indicó que "siempre una reforma es importante, evidentemente que afecta a la ciudadanía de distintas maneras (...) que sea tan determinante como dicen los empresarios, yo no lo creo".

Sobre su voto a favor de legislar, el diputado reiteró que nunca hubo un acuerdo con la oposición.

"El partido no me dice a qué hora voy al baño o tomo desayuno (...) nunca hubo acuerdo (con la oposición)", reiteró. "Consideraré lo que diga mi partido, pero la decisión es mía".

De acuerdo al parlamentario, el tema se conversó dentro de la bancada, pero no se puede obligar a nadie a votar por algo.

Sobre la duración de la discusión de la reforma, el diputado estima que a fin de año ya debería estar listo.

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