Manuel José Ossandón: "El cambio de gabinete es concordante con los valores de la derecha social"

Desde que el Presidente Sebastián Piñera nominó a Gerardo Varela como ministro de Educación, en enero pasado, el senador de Renovación Nacional Manuel José Ossandón evidenció su aprensión sobre el nombramiento. Su principal inquietud apuntaba a si el abogado -conocido en aquel entonces por su posición contraria a la gratuidad universitaria- iba a implementar el beneficio en la educación técnico-profesional, como comprometió el Mandatario entre primera y segunda vuelta.

"Es un ministro del Presidente Piñera y va a hacer lo que le ordene su jefe", fue la apuesta de Ossandón, quien por esos días agendó un encuentro con el recién nombrado ministro para abordar justamente el tema de la gratuidad.

Una vez iniciado el gobierno, sin embargo, las aprensiones dieron paso a las críticas frontales. En abril, tras el comentario de Varela sobre el uso de preservativos -"mis hijos son unos campeones, necesitan más de tres parece", aseguró- el senador lo motejó como "el campeón de los autogoles". Así, se convirtió en el primer primer personero del oficialismo en resaltar el potencial daño que provocaba al gobierno las habituales salidas de libreto del titular de Educación. Ofensiva que remarcó en julio, luego que el secretario de Estado recomendara hacer bingos para reparar la infraestructura de los colegios, en un episodio que antecedió al declive del gobierno y del Mandatario en los sondeos de opinión pública.

"Entre primera y segunda vuelta, el Presidente dio un giro importante y en materia educacional dio una gran señal a todos los chilenos. Los dichos del ministro le hicieron un gran daño a la figura del Presidente Piñera, porque se apartaban de la línea original diseñada por por él. Era demasiado evidente que no compartía la mirada social que el Presidente adoptó con respecto a la educación pública", sentencia Ossandón, pocas horas después de concretarse el primer cambio de gabinete de la segunda administración de Piñera, marcado justamente por la salida de Varela.

Pocas horas antes del cambio de gabinete usted dijo que hubiera "sacado altiro al ministro Varela". ¿Cree que el Presidente Piñera demoró mucho en darse cuenta de lo que significaba mantenerlo en el gabinete?

Lo importante es que el Presidente hizo lo correcto. Este cambio de gabinete se hizo antes de cumplir seis meses en el gobierno. Eso es evidencia de que el Presidente no esperó mucho para actuar.

Antes usted ya había dicho que "Varela estaba muy lejos de la derecha social que Chile necesita". ¿De qué magnitud es el daño que, cree usted, el ministro le hizo al proyecto político del gobierno?

Este gobierno está recién empezando. Hay tiempo para impactar positivamente la vida de los chilenos. Este cambio de gabinete es concordante con los valores de la derecha social.

¿Qué otras señales espera dé Piñera para fortalecer esas banderas?

Las banderas de la derecha social estan hace tiempo al medio de La Moneda y con el correr del tiempo se han fortalecido. Nuestro gobierno tiene una fuerte vocación social.

Piñera en un primer momento justificó la frase de los bingos. También dijo que era una "anécdota". ¿No se le tomó el peso al simbolismo que representó la frase de los bingos?

El Presidente sí le tomó el peso. Quiso evitar un ajuste de gabinete porque correctamente le quiso dar una oportunidad adicional al exministro Varela. Eso es comprensible. Lo importante es que el ajuste se hizo y ahora estamos en otra etapa.

¿Qué le pareció que el cambio de gabinete se acotara exclusivamente a Educación y Cultura?

El Presidente Piñera tiene el derecho de escoger a los miembros de su gabinete. Los miembros de Chile Vamos tenemos derecho a dar nuestra opinión. Así funciona la política.

¿A qué atribuye la caída en las encuestas que experimento Piñera y el gobierno en las últimas semanas? ¿Son solo los errores de los ministros o hay un tema de fondo?

Como siempre, es una combinación de factores. Algunos se pueden corregir rápido, como el cambio de gabinete que se hizo. Otros errores van a tomar más tiempo. Y el efecto negativo de la guerra comercial entre (Donald) Trump y China va a complicarnos por un tiempo. Uno no le puede echar la culpa de eso a Piñera. Aunque la izquierda le quiere echar la culpa a Piñera de todo, hasta de la guerra comercial de Trump.

Se apuntó mucho al ministro José Ramón Valente, por su recomendación de poner parte de las inversiones fuera de Chile. ¿Cree que él también debió salir del gabinete?

Valente habló como asesor financiero y no como ministro. Eso fue un error. Si Valente se dedica cien por ciento a ser ministro, va a ser un gran activo para este gobierno y el tiene muy bien encaminado varios temas, entre otros la Ley de Pesca.

¿Cómo debiera enfrentar el Presidente eventuales nuevos errores comunicacionales de loa ministros? El mensaje es que ya no hay espacio para equivocarse?

El Presidente tiene buenos asesores yo no voy a dar consejos. Mi rol es colaborar desde el Senado a que el gobierno tenga éxito.

El cambio de gabinete se produce justo en momentos en que se debate sobre el desacople entre los indicadores económicos y la caída en las expectativas de los chilenos respecto al rumbo del país.

¿Cree que se debió dar una señal en ese sentido?

La actividad económica ha tenido una franca recuperación, hay una mejora considerable en la calidad del empleo, recibimos una gestión "debilucha", El Presidente ha dado señales potentes. Es muy tranquilizador que tengamos un gobierno con gente que entiende bien de economía. Y que las cifras nos respalden.

¿A qué adjudica entonces esa percepción pesimista que revelan las encuestas sobre el rumbo del país?

Es comprensible. El ambiente internacional es incierto. Pero la economía hoy anda mejor que hace un año y que durante todo el gobierno anterior. Hoy los chilenos están viviendo mejor y al menos yo veo con optimismo el futuro.

El ajuste también coincidió con el nombramiento de Michelle Bachelet en la ONU y la posterior entrevista donde critica al gobierno. ¿Fue adecuado hacer el cambio de gabinete en este contexto?

Espero que a ella le vaya muy bien. Todos queremos que Bachelet sea una activa defensora de los DD.HH. en el mundo. Estoy seguro que ella quiere lo mismo. Deberá demostrar que le importa su trabajo aunque eso signifique pelearse con sus aliados ideológicos en Cuba y Venezuela.

¿Es bueno o malo para el gobierno que Bachelet asuma un cargo internacional?

Es bueno. Pero todo dependerá de cómo lo haga. Si hace la vista gorda a lo que pasa en Venezuela o Cuba, su impacto será negativo. Si en cambio se compromete con la defensa de DD.HH. independientemente del régimen que sea, su legado será recordado y admirado por todos.