Monsalve, la trama tras la caída del subsecretario que pudo ser el primer ministro de Seguridad

“En primer lugar, quiero informar que he presentado mi renuncia al Presidente de la República. Lo he hecho porque, como ustedes saben, durante esta semana se ha presentado una denuncia en mi contra”.

A las 14.37 horas Manuel Zacarías Monsalve (59) se presentó en el patio de Los Naranjos del Palacio de La Moneda para hacer pública su renuncia a la Subsecretaría del Interior, cargo que ocupó desde el 10 de marzo de 2022 y que lo perfiló como una de las figuras con mayor proyección del gobierno. Esto al punto que su nombre se evaluaba para asumir como primer ministro de Seguridad, la nueva repartición que se tramita en el Congreso.

El ahora exsubsecretario informó su alejamiento del cargo tras una reunión sostenida momentos antes con el Presidente Gabriel Boric y la ministra del Interior, Carolina Tohá, quienes le notificaron que su caso operaría de la misma forma que se ha adoptado con otras autoridades que enfrentan procesos judiciales, a quienes se les pidió la renuncia para que se concentren en sus defensas. Se trata del llamado criterio Tohá.

A esa hora ya circulaba en los medios la noticia de que la Fiscalía Regional Metropolitana Centro Norte estaba indagando al subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, tras una denuncia por violación interpuesta por una asesora de la exautoridad al Ministerio Público el 14 de octubre pasado y que investiga el fiscal Xavier Armendáriz.

Tohá había sido notificada de la denuncia el martes, según la versión de Interior, la notificación le llega por parte del director de la PDI, Eduardo Cerna. Después de eso la ministra informó al Presidente, quien le dio la posibilidad de viajar al Biobío para contarle a su familia su versión de los hechos ocurridos el 22 de septiembre, en un hotel de Santiago al que llegó con la denunciante tras haber ido a cenar a un restaurante peruano.

Según el entorno del exsubsecretario hasta ese minuto no estaba resuelto que saldría del cargo.

“Quiero, respecto a esa denuncia, reafirmar que tengo la absoluta convicción de que no he incurrido en ninguna conducta constitutiva de delito. Por lo cual, en el marco de la investigación, demostraré mi inocencia”, dijo el PS en el último punto de prensa que dio en La Moneda.

Después de eso, el médico socialista se despidió de su equipo, a quienes también les aseguró que buscaría demostrar su inocencia. Luego salió del palacio de La Moneda.

Tras el punto de prensa de Monsalve, la ministra Tohá se refirió al asunto. “Hasta el día de hoy, ni Manuel Monsalve ni las autoridades de gobierno conocemos la denuncia. Sabemos una información muy general”, dijo.

Tohá, por otra parte, informó que hay un sumario administrativo en curso “para conocer todas las situaciones que pueda haber implicadas”.

“Tenemos la seguridad de que, a pesar de que esto es duro y es difícil, se va a lograr enfrentar esta situación sin que se afecte el trabajo que tenemos que hacer para los chilenos y las chilenas, para su seguridad y para el cumplimiento de las tareas que estas distintas carteras tienen por delante”, añadió la jefa de gabinete.

La naturaleza de la denuncia que pesa Monsalve obligó al Ejecutivo a activar un operativo de emergencia para intentar controlar los daños a la administración Boric que se ha declarado un “gobierno feminista” y a la gestión del Ministerio del Interior, que hace solo una semana enfrentó una acusación constitucional contra la ministra Tohá por su manejo de la crisis de seguridad.

Apenas conocidos los hechos, comenzó la presión opositora contra el gobierno por no haber tomado cartas en el asunto tras conocer la denuncia interpuesta contra Monsalve, y desde las bases del Frente Amplio empujaron por una pronta salida de la autoridad.

La operación para controlar la crisis debía ser cuidadosa para no afectar los equilibrios entre las coaliciones de gobierno, considerando que el Ministerio del Interior hasta hoy estaba comandado por figuras del Socialismo Democrático: Tohá (PPD) en Interior, Eduardo Vergara (PPD) en Prevención del Delito y Monsalve (PS) en la Subsecretaría del Interior.

Así las cosas, el gobierno optó por una solución rápida ideada por la ministra Tohá: mover al abogado Luis Cordero desde el Ministerio de Justicia a la Subsecretaría del Interior, lo que los obligó a subir a Jaime Gajardo (PC) a la titularisad en Justicia, a pocos días de que se presentara en el Congreso el proyecto de ley para el nuevo sistema de nombramiento de jueces.

Se trata de una agenda prioritaria para el gobierno después de la debacle que dejó la remoción en la Corte Suprema de los ministros Sergio Muñoz y Ángela Vivanco.

A las 12.21, el entonces ministro de Justicia, Luis Cordero, ingresó a La Moneda por la entrada principal. Su intención era grabar un live en redes sociales con la ministra de la Segegob, Camila Vallejo, hablando justamente sobre la reforma al sistema de nombramientos judiciales. Sin embargo, eso no ocurrió. Minutos antes La Segunda dio a conocer la denuncia contra Monsalve.

Ambas autoridades cruzaron después a Presidencia para reunirse con la ministra del Interior, Carolina Tohá, y el jefe de Estado, quien horas antes había dado un punto de prensa para referirse a la destitución del exjuez de la Suprema Sergio Muñoz.

En su ingreso a Palacio, Cordero aseguró que no tenía conocimiento de la denuncia contra Monsalve, lo que repitió cuando entró por tercera vez en el día a La Moneda, esta vez convertido en subsecretario del Interior, a las 17.47 horas.

Luego de la comunicación oficial de Presidencia sobre su nuevo cargo, el ahora exsecretario de Estado regresó al Ministerio de Justicia, bajó al hall del primer piso y se despidió de los funcionarios.

Las mamparas del ingreso principal fueron cerradas y resguardadas por gendarmes. En el interior, dicen quienes presenciaron el momento, un emocionado Cordero agradeció la labor de los trabajadores.

“Llegué en un momento difícil y me voy en un momento difícil”, dijo Cordero, refiriéndose a que su arribo al gobierno fue en medio de la crisis por el otorgamiento de indultos presidenciales que detonaron la solicitud de renuncia de su antecesora, Marcela Ríos, en enero de 2023.

Pasado el mediodía también llegó a La Moneda la ministra de la Mujer, Antonia Orellana. Venía llegando a Chile desde Ginebra, Suiza.

A ella le tocó explicar porqué el gobierno se dio un plazo para decidir la salida de Monsalve después de conocer la denuncia en su contra. Su versión fue que se esperó porque se “estableció un plazo de evaluación”.

En la derecha hicieron un paralelo entre la situación del médico socialista y la del exsubsecretario de Previsión Social, Christian Larraín, quien abandonó el gobierno el mismo día que enfrentó una denuncia por acoso sexual en su contra.

Fuentes de Palacio sostienen que el caso de Larraín no llegó a instancias penales y se enfrentó en la interna del Ministerio del Trabajo, a diferencia de lo ocurrido en el caso de Monsalve, cuya acusación está siendo cursada en el Ministerio Público.

Como sea, en la derecha las diputadas de la UDI, Flor Weisse y Carla Morales, además de la RN Paula Labra, cuestionaron la “reacción tardía” del Ejecutivo para sacar a Monsalve. De hecho, parlamentarias de Renovación Nacional pidieron citar a las ministras Tohá y Orellana a la comisión de Mujer para que den explicaciones al respecto.

El efecto en el oficialismo fue inmediato. El más golpeado fue el PS que vio caer a una de sus principales figuras. Y es que, además de sonar como eventual ministro de Seguridad, Monsalve era carta para el Senado en la Región de la Araucanía.

La presidenta del Partido Socialista -colectividad en la que milita Monsalve-, Paulina Vodanovic, valoró la renuncia del otrora subsecretario y señaló que “hay una investigación en curso, esperamos que se investigue con el máximo de objetividad como corresponde de acuerdo a la ley, conforme a la presunción de inocencia, pero también nos preocupa la revictimización de la víctima”.

Asimismo, la presidenta del Frente Amplio, Constanza Martínez, calificó la denuncia como “grave” y aseguró que en su colectividad sostienen que “la defensa de las instituciones y la continuidad de su funcionamiento está por sobre cualquier autoridad”.

Por otra parte, expresó que abogan “desde un compromiso feminista porque la justicia proceda y se resguarde adecuadamente a la denunciante. El desafío de seguridad que tenemos como país exige que nuestra energía esté en seguir trabajando activamente por el derecho de todas y todos a vivir con tranquilidad”.

En tanto, la diputada Maite Orsini (FA) aseguró tener “plena confianza en que la investigación del fiscal (Xavier) Armendáriz se realizará con celeridad, independencia y rigurosidad ante la gravísima denuncia contra el exsubsecretario Monsalve”.

“Su permanencia en el cargo a todas luces era insostenible en un gobierno que pone a las mujeres en el centro”, sostuvo la parlamentaria.