Sebastián Torrealba, diputado de RN: "Los extremos e individualismos no caben en Chile Vamos"

A pocos días de cerrar el año legislativo, el diputado Sebastián Torrealba (RN) aborda los temas que han marcado el desempeño de la bancada más numerosa del Congreso, y destaca que el desafío de 2019 será conformar un verdadero equipo, que actúe de manera cohesionada. Ello, luego de que las diferencias que existen entre los diputados quedaran de manifiesto por la vinculación de algunos de sus pares con el excandidato presidencial José Antonio Kast.

Hace unos días se hizo pública la preocupación que algunos ministros y subsecretarios RN han expresado en torno al rol del partido, la fragmentación que existe en su bancada y el debate por el pinochetismo. ¿Comparte esa preocupación?

La preocupación de los ministros es una preocupación que tiene cualquier militante de RN. Pero hay que ser súper claro: el pinochetismo dentro de RN no existe. RN ha tenido instancias institucionales donde sacamos todo lo que tiene que ver con gobierno militar de nuestra declaración de principios, y lo que hay en la bancada constantemente es hablar de futuro, educación, salud, pensiones, que son los temas que la gente nos obliga a discutir y llevar soluciones. ¿A quién le importa el pinochetismo hoy? A nadie. Es una discusión del pasado que podrá ser comentario en un almuerzo, pero dentro de los principios de RN no existe. Es más, en RN hay un "desde" que tiene que ver con la defensa y promoción de los DD.HH., y el pinochetismo no es divisible de las violaciones a los DD.HH.

Usted planteó que un desafío para 2019 es transformarse en la bancada "más relevante, no solo la más numerosa". ¿Qué falta para eso?

Ese desafío tiene que ver casi con una gestión de recursos humanos, donde haya más compenetración como equipo. Mario Desbordes ha logrado llevarnos hacia allá y, por eso, creo que su liderazgo es relevante para lo que viene; él nos puede ayudar a empujar que los parlamentarios estén alineados con los principios que están en el programa de gobierno. Siempre dijimos que "Piñera es RN", y lo que debe venir este año es que tengamos un apoyo irrestricto a las iniciativas que ha propuesto el Presidente; podemos agregarles valor a los proyectos, teniendo el foco en que nos vaya bien a todos: si al gobierno le va bien, a RN le va bien, y lo primero es que le vaya bien al gobierno.

¿Y cómo se pueden equilibrar las diferencias internas para que la diversidad sea un elemento positivo y no un factor de desorden?

Tomo las palabras de Mario Desbordes, que dice que prefiere tener un partido grande y diverso, que un partido chico y ordenado. Prefiero ese partido grande, que impulse las propuestas de gobierno y que tenga esas diferencias, como las tenemos, pero siempre respetándonos. Y en lo medular, en lo realmente importante -en salud, en educación, en pensiones- vamos a necesitar de todos los parlamentarios de RN, y no tengo dudas de que así va a ser.

Uno de los temas en que las diferencias se evidencian es en el matrimonio igualitario. Ahora que se retomó la discusión en el Senado, cuando el proyecto llegue a la Cámara, ¿usted lo va a aprobar?

He estado siempre a favor del matrimonio igualitario. Es momento de que Chile se ajuste a estos cambios sociales que vienen hace tiempo. Además, nuestra disposición tiene que ser de diálogo en el Congreso. No podemos, como se hacía antes con una lógica binominal, bloquear los temas, tenemos que discutirlos.

¿Matrimonio igualitario con o sin adopción?

Con adopción. Tenemos que aumentar las posibilidades de que un niño encuentre una familia.

En lo político, uno de los asuntos que generaron diferencias en RN fue la vinculación de algunos diputados con José Antonio Kast. ¿Es él un factor que divide a RN?

Encuentro bastante de mal gusto estar candidateándose a 10 meses de haber asumido un gobierno que apoyaste y, estratégicamente, me parece una tontera. Si les preguntas a los 36 diputados RN si apoyarían a Kast antes que a un candidato de RN, vas a encontrar solamente a uno, Cristóbal Urruticoechea, que ya lo dijo públicamente. De los 35 restantes, ninguno va a decir que va a apoyar a José Antonio Kast por fuera de un liderazgo de RN. Por lo tanto, la verdad es que no genera una división en la práctica. Personalmente, no comulgo con muchas de las cosas que promueve Kast, porque creo que tiene un proyecto individualista, y siempre he dicho que tanto los extremos como los proyectos individuales destruyen proyectos políticos. Prefiero que todos se sumen a Chile Vamos y veamos de una forma democrática si representa o no al bloque, y en una primaria futura no tengo duda de que vamos a tener un candidato de RN.

A propósito del debate por el pinochetismo, Hernán Larraín Matte, presidente de Evópoli, dijo que "la diversidad en Chile Vamos tiene límites". ¿Lo comparte?

Insisto, los individualismos y los proyectos extremos destruyen proyectos políticos. Si alguien quiere incorporarse a Chile Vamos tiene que, al menos, estar en línea con nuestros principios, y los principios de Chile Vamos no son extremos. Te pongo un ejemplo: el PC, que es probablemente el partido más extremo de Chile, es un partido que constantemente destruye proyectos políticos. Les he dicho a los del Frente Amplio: no se junten con el PC, porque los va a destruir, así como destruyó a la Nueva Mayoría y ha destruido proyectos políticos para atrás. Los extremos e individualismos no caben en Chile Vamos; los llaneros solitarios, los Quijotes de La Mancha no sirven.

¿José Antonio Kast destruiría Chile Vamos si se integra?

Si no se incorpora a la lógica de principios y valores de Chile Vamos, que siempre defiende los DD.HH., tiene difícil el camino. Pero, por lo demás, nunca se ha querido sumar y nunca nadie lo ha echado de ninguna parte.

Para sumarse, ¿la coalición debe exigirle condiciones mínimas?

Si él está de acuerdo con los principios y valores de Chile Vamos, de respeto a la diversidad y la tolerancia, de defensa a rajatabla a los DD.HH., ningún problema.

Si esa incorporación se diera, J. A. Kast participa de una primaria y la gana, ¿usted lo apoyaría?

No creo que la gane.

¿Y si la ganara?

No creo que la gane.