Segunda vuelta de gobernadores se convierte en la elección con más baja participación desde que se implementó el voto voluntario

Las cifras llaman la atención por lo bajas: 12,21% de participación en Antofagasta, 12,66% en Atacama y 12,77% en Los Lagos. Fueron las estadísticas que entregó el Servicio Electoral el domingo por la noche respecto de la segunda vuelta de gobernadores que se realizó en 13 regiones del país, considerando que Valparaíso, Aysén y Magallanes eligieron a su autoridad regional en primera vuelta.

En esos casos, la cantidad de votantes fue apenas un tercio de los que habían acudido hace un mes atrás, con 37% en Antofagasta, 40,16% en Atacama y 41,29% en Los Lagos. Y provocó una curiosidad: las tres autoridades electas en esta ocasión se impusieron con menos votos que los que habían obtenido en la primera vuelta.

El caso extremo fue el de Patricio Vallespín en Los Lagos: si en mayo él obtuvo 99.842 votos, el 36,45%, esta vez la votación total de la región en el balotaje fue de 92.665, es decir, siete mil sufragios menos que lo que el postulante había obtenido en solitario el 15 y 16 de mayo. El exdiputado DC ganó holgadamente, eso sí, con 57.821 respaldos (62,40%).

Y la baja participación fue una tendencia a nivel nacional. De acuerdo a los datos entregados por el Servel, en la jornada de este domingo votaron 2.556.898 de los 13.040.819 chilenos que podían hacerlo en las regiones que tenían segunda vuelta de gobernadores. El 19,61% de participación hace que, a lo menos en esos territorios, estos comicios se ubiquen como los de menor cantidad de votantes desde que se realizó el cambio a voto voluntario en 2012.

La elección que hasta ahora ocupaba ese puesto era la de alcaldes de 2016, donde votaron 4.926.935 personas, que equivalía al 34,89%. Desde allí en adelante, todas las elecciones nacionales celebradas superaron a lo menos los seis millones cuatrocientos mil votantes, con comicios como la segunda vuelta presidencial de 2017 y el plebiscito constitucional de 2020 que sobrepasaron los 7 millones.

La región que tuvo los números más elevados en cuanto a participación fue la Metropolitana, donde votaron 1.503.202 personas, el 25,67% del padrón. La cifra, con todo, fue casi 20 puntos menor a la de las elecciones del 15 y 16 de mayo, donde sufragó el 45,46%, equivalente a 2.662.667 votantes.

Eso sí, al interior de la RM hubo fuertes diferencias entre distritos y comunas. De hecho, la mayoría de los siete distritos que la componen vio reducida su participación en 20 puntos o más, reduciendo a la mitad los votantes de mayo pasado. Sólo hubo dos excepciones: el distrito 10 y el 11.

En el primer caso, que agrupa a las comunas de La Granja, San Joaquín, Santiago, Providencia, Ñuñoa y Macul, hubo dos grupos de comunas identificables: los primeros tres oscilaron entre el 20% y el 25% de participación, Macul llegó al 29%, Providencia al 37% y Ñuñoa al 39,54%. Como bloque, votó el 29,17% del padrón, 15 puntos bajo la cifra de la primera vuelta.

Y respecto al distrito 11 -que incluye los municipios de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén-, pese a que se redujo la participación en casi 100 mil votantes, ésta alcanzó el 41,08% contra el 55,16% de mayo pasado. De hecho, este distrito tuvo a la comuna con mayor participación de la RM: Vitacura, con el 52,82%, donde Claudio Orrego obtuvo el 94,85% de los sufragios.

Entre las comunas que tuvieron fuertes bajas de participación en la capital, resalta Maipú, que pasó de 49,9% a 25,45%, perdiendo 95.333 votantes; Puente Alto, donde la reducción fue desde el 43,51% al 21,13%, equivalente a 89.446 votos menos; La Florida, que se movió del 50,67% del padrón al 28,33%; y La Pintana, que pasó del 36,39% al 16,07%.